La Comandancia ha informado hoy en una nota de prensa que los detenidos, de 20 y 26 años, respectivamente, ya han sido puestos a disposición judicial y ha destacado la ayuda de los vecinos en estos arrestos.
La Guardia Civil empezó a investigar "la comisión de varios hechos delictivos" en Aguas Nuevas, en concreto el robo de un coche en una empresa con el que los ladrones "se dirigieron a la piscina municipal", forzaron la puerta de acceso y sustrajeron "varios electrodomésticos, comestibles y dinero en metálico".
El comunicado ha añadido que unos días más tarde "volvieron a sustraer otro vehículo de la misma empresa" y que, sin embargo, "esta vez no fueron más allá porque una patrulla del Instituto armado dio el alto al conductor, de forma que abandonaron el coche".
Los agentes investigaron la identidad de los ladrones y recibieron la ayuda de un vecino de Aguas Nuevas que "comunicó a la Central Operativa de Servicios el avistamiento de un vehículo en actitud sospechosa, ocupado por varias personas ajenas a la localidad".
Una de las patrullas pudo así localizar ese vehículo sospechoso e "identificar a sus ocupantes, resultando ser uno de ellos uno de los autores de los hechos delictivos que venían investigándose".
En el interior del vehículo se localizaron "diversas herramientas, pasamontañas y varias prendas de vestir para ser utilizadas después de la comisión de los robos con el fin de pasar desapercibidos y, así, dificultar las tareas de reconocimiento de posibles testigos".
Tras la detención de este individuo se inició una investigación que culminó con la detención del segundo procesado, quien "presuntamente había participado en los hechos investigados" y que era el encargado de enviar los efectos sustraídos a Rumanía.
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