En un comunicado remitido este lunes, la Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha (APAMCLM) ha solicitado colaboración ciudadana para luchar contra los graves problemas de electrocución en la avifauna de Castilla-La Mancha y ha pedido que ante cualquier sospecha de mortandad de un animal se avise de inmediato a los agentes de su localidad o al teléfono de emergencias 112.
Según los datos de la asociación, durante 2018 se han producido más de 400 casos de electrocuciones de especies protegidas en las provincias de Toledo y Albacete, y en el último mes –contando la Navidad- en la provincia de Toledo han recogido un águila real, tres águilas imperiales, tres águilas perdiceras, y otras aves como milano real y azor.
En todos los casos, los cadáveres se han levantado aplicando el protocolo de electrocución, de modo que se pueda determinar la causa de la muerte y desestimar otras, como el veneno, y se han derivado al Centro de Rapaces Ibéricas.
APAMCLM ha sugerido que ante la aparición del cadáver de un ave que pudiera haber muerto por electrocución se puede colaborar contactando con cualquiera de las entidades integrantes en la Plataforma SOS Tendidos Eléctricos.
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