Castilla-La Mancha aumenta la seguridad en el hueco de Los Chorros, en los Calares del Río Mundo (Albacete)

De esta forma, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha sustituye la infraestructura que ha habido hasta la actualidad, que estaba pensada para guiar al visitante y evitar el deterioro en las laderas, por una nueva debido al aumento de visitantes, el cambio del perfil en las visitas, por los esfuerzos provocados por sentarse en los rollizos, apoyarse en grupo y por los denominados "selfies", tal y como ha explicado este martes el Gobierno regional en un comunicado.

Entre las actuaciones que se acometen se encuentra el arreglo del paso del arroyo de la Pedorrilla, mediante piedras de sillería con sistema antideslizante y cable para pasamanos, y la sustitución de la talanquera de madera en el tramo de senda que discurre desde la Piedra del Señorito hasta las calderetas, incluyendo la de los dos puentes.

También se está procediendo al arreglo de la senda en las zonas más deterioradas, con la realización de nuevos escalones y la adecuación de la señalética a la nueva situación de la zona, al tiempo que se unificarán todas las señales de la zona actual de este tramo y añadiendo las nuevas normas de visita para mejorar la seguridad del visitante.

Esta actuación será financiada con cargo al Programa de Desarrollo Rural de Castilla- La Mancha relativo a "Infraestructuras recreativas, información e infraestructuras de alojamiento de pequeña escala" y dichas inversiones se llevarán a cabo con cargo al FEADER en un 75 por ciento, la Junta de Comunidades asumirá el 15,5 por ciento, y la Administración General del Estado un 7,5 por ciento.

El hueco de los Chorros o Nacimiento del río Mundo es la zona más visitada del Parque Natural de los Calares del Mundo y de la Sima y se calcula que el recorrido de unos 800 metros de este paraje recibe una media de entre 150.000 y 200.000 visitantes al año, e incluso algún año se han sobrepasado los 300.000 visitantes.

El recorrido discurre por la ladera izquierda del río Mundo, que termina convirtiéndose en una pared de más de 100 metros de altura y acaba en un mirador situado a unos 60 metros de altura sobre el inicio de la senda.