El Ayuntamiento de Albacete pondrá en marcha una experiencia piloto para la recogida selectiva de residuos orgánicos

En esta primera fase del programa, tal y como ha detallado Julián Ramón García, a lo largo del mes de julio se instalarán 80 contenedores de 2.200 litros de capacidad en los barrios Hospital, Universidad, Hermanos Falcó y Medicina con el objetivo de que este nuevo servicio entre en funcionamiento el próximo mes de agosto, ha informado el Consistorio en nota de prensa.

"El Ayuntamiento de Albacete pone la innovación tecnológica al servicio de la ecología. Avanzamos hacia una ciudad más sostenible, con un servicio de recogida de basuras más eficiente. Este es el camino a seguir", ha señalado.

Este servicio, que se prestará a través de la empresa que gestiona actualmente la limpieza viaria y recogida de residuos urbanos, Valoriza Medioambientales S.A. permitirá recuperar los residuos orgánicos compuestos de materia biodegradable, como son los restos de fruta, verdura, carne y pescado; cáscaras de huevo, marisco y frutos secos; posos de café e infusiones; tapones de corcho, sin añadidos de plástico u otros materiales; cerillas y serrín; papel de cocina sucio, servilletas de papel usadas y pequeños restos de jardinería.

Durante este período de prueba, los resultados cosechados a través de esta experiencia, tal y como argumentó el responsable municipal de Sostenibilidad y Cambio Climático, permitirán evaluar aspectos como el porcentaje de recuperación de materia orgánica, detectar problemas derivados de la instalación de un nuevo contenedor en la vía pública y del sistema de recogida elegido e identificar el grado de participación de la ciudadanía. "Se trata de una fase de prueba, un programa piloto para evaluar la experiencia de estos nuevos contenedores, y lo haremos contando con la opinión de los vecinos de estos barrios".

Estos nuevos contenedores, que se distinguirán de los actuales por el color marrón de su parte superior, estarán equipados con un sistema de cierre automático y se activarán a través de una tarjeta de usuario tipo RFID, bajo tecnología Smart City.

Este sistema permite establecer los horarios en los que el contenedor se puede utilizar, bloqueándolo en aquellas horas en las que no se puedan depositar residuos; elegir en que contenedor puede depositar cada persona sus residuos, impidiendo el acceso al resto de contendores; y obtener datos estadísticos como la frecuencia de uso, que resulta útil para ajustar el dimensionamiento de los contenedores y conocer la generación de biorresiduos por persona en un determinado periodo.

Con el objetivo de concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de depositar los residuos orgánicos en estos nuevos contenedores, el Ayuntamiento de Albacete realizará una campaña informativa, que incluirá reuniones para exponer este sistema en los centros socioculturales de los barrios en los que se desarrollará esta experiencia piloto y la distribución de material informativo detallando el nuevo servicio en los domicilios de estos barrios.

Asimismo, a las personas que participen en estas reuniones informativas se les hará entrega de la tarjeta de apertura de estos contenedores, un rollo de bolsas biodegradables y un cubo de 10 litros con los distintivos específicos para reciclar residuos orgánicos.

La inversión necesaria para la puesta en marcha y seguimiento de la propuesta piloto se hará con cargo a las mejoras ofertadas por la empresa adjudicataria de la limpieza viaria y recogida de residuos urbanos.

TALA DE ÁRBOLES

De otra parte, como medida preventiva para garantizar la seguridad del alumnado del Colegio San Fernando y tal y como aconsejan informes técnicos del Servicio Municipal de Medio Ambiente, el Ayuntamiento de Albacete talará un conjunto de árboles en las inmediaciones de este centro educativo, en el Parque de Abelardo Sánchez, que por su altura y su inclinación constituyen una seria amenaza ante el riesgo de caída.

Se trata de veinte árboles de la especie "pinus halapensis" dispuestos de tal manera que, de desplomarse, podrían hacerlo sobre las instalaciones del Colegio San Fernando.

La decisión ha sido respaldada por todos los grupos municipales en la Comisión Informativa del área celebrada este lunes, y se ha tomado una vez que los informes técnicos han descartado la posibilidad de otras soluciones. De hecho, se ha podido evitar la tala de otros cuatro árboles, que serán sometidos a un seguimiento periódico, puesto que en la actualidad no presentan anomalías preocupantes.

Los árboles eliminados serán repuestos por otras especies que se adapten mejor a la fisionomía del Parque.

Esta actuación también da respuesta a una reivindicación de la comunidad educativa del Colegio San Fernando, que pedía encarecidamente una solución al hecho de que ante cada episodio de temporal de viento o agua, que implique riesgos de caídas de ramas, deba cerrarse este Parque al público, con la consiguiente clausura del Colegio y la pérdida de clases para su alumnado.

El concejal de Sostenibilidad y Cambio Climático ha expuesto que "debe prevalecer siempre la seguridad de los vecinos", argumentando que la medida tomada "es la más sensata dentro de las posibles" y que se ajusta a "los criterios técnicos, tras analizar el estado de salud de todos los pinos cercanos al colegio".