El alcalde de Albacete, Vicente Casañ, en presencia del vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, explicó que el Ayuntamiento estudia recurrir a la fórmula del colegio concertado para dar una respuesta educativa a más corto plazo a los vecinos del barrio de Medicina. Un hecho sorprendente, ya que ANPE lleva una década demandando la construcción de un centro público en dicha zona y pide al consistorio que valore únicamente la opción de que sea un colegio público.
Esta reivindicación del sindicato mayoritario de Enseñanza está justificada por los datos de natalidad de una de las mayores zonas de expansión de la capital y que según el INE, sólo entre la Avenida de Eleazar Huerta, con las carreteras de Valencia y Murcia y la Avenida de España, hay 614 menores de 10 años. Un dato que justificaría, sobradamente, la construcción de un colegio público que garantizaría que todas las familias de esa zona puedan acceder a la Enseñanza Pública; sinónimo de gratuidad, calidad e igualdad de oportunidades.
ANPE lamenta el silencio cómplice del vicepresidente regional de Castilla-La Mancha, presente en dicha reunión, puesto que el compromiso del Gobierno regional en esta y la anterior legislatura, era construir un centro público en la zona de Medicina, y en ningún momento se valoró que fuera concertado.
Para ANPE la justificación de la construcción de un centro concertado no puede fundamentarse en su pronta construcción, sino que debe basarse en complementar a la enseñanza pública cuando no se pueda cubrir la demanda existente. Un hecho que no ocurre en ningún caso, puesto que Medicina no cuenta con ningún centro público, y la demora en su construcción solo es debida a una pésima gestión de la Administración.
ANPE exige la retirada de esta propuesta, y no descarta acciones ni movilizaciones del profesorado si esta fórmula de concierto se mantiene, y pide al gobierno regional que cumpla sus compromisos y que los nuevos centros educativos de las zonas de Medicina y Universidad sean públicos.
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