a raíz del aviso de un vecino, y que ahora tramita las denuncias pertinentes por haberse saltado las normas del estado de alarma aún vigente en España.
La Policía Local ha hecho pública esta actuación a través de su perfil en la red social Facebook, consultado por Efe, en el que ha precisado en cuanto a los asistentes que "uno salía del frigorífico, otro de debajo de la cama, de armarios, del trastero y de la terraza", y que una vez desalojada la fiesta fueron identificados y tendrán que hacer frente a multas de entre 601 y 30.000 euros, aunque "lo que hay en juego no tiene precio".
A preguntas de los periodistas en una rueda de prensa para presentar las actividades del Corpus Christi 2020, Tolón ha indicado que la Policía Local acudió a la vivienda alertada por la llamada de un vecino y ha avanzado que incluso algunos asistentes se fueron antes de que llegaran los efectivos.
"Esperamos que no vuelva a ocurrir", ha sentenciado la regidora municipal, al tiempo que ha agradecido la colaboración ciudadana para que se cumplan las normas establecidas y ha aseverado que "un repunte sería algo terrible para la salud y la economía de la ciudad y el país", por lo que ha pedido "paciencia y responsabilidad".
Asimismo, Tolón ha indicado que no ha habido incidentes con respecto a la práctica del botellón en la ciudad este pasado fin de semana, después de que se prohibiera y se coordinara la colaboración de la Policía Nacional con la Local para la vigilancia en este sentido.