El farolillo rojo quiere abandonar esa posición cuanto antes. El choque ante el Mirandés clave, para iniciar con un cambio de tendencia.
El Albacete Balompié está teniendo una temporada para olvidar. Farolillo rojo de la Liga SmartBank, con solo dos victorias en 18 encuentros, y con unas sensaciones en el juego que dejan mucho que desear desde que dio comienzo el curso.
La llegada de Alejandro Menéndez, tercer maestro de orquesta en lo que va de año, no ha obtenido el efecto deseado por parte de la directiva, ya que, en la anterior jornada, salió muy mal parado en su visita a Castellón, cayendo por 3-0 a domicilio.
Para intentar ir recortando distancia con los equipos que marcan la zona de la permanencia, el Albacete Balompié necesita sumar de tres en tres lo antes posible y aprovechar todas las jornadas que se pongan en liza. El primer paso para sustentar la salvación, o al menos no descolgarse de la pelea, es hacer del Carlos Belmonte un auténtico fortín. Si en el templo albaceteño se consiguen varias victorias consecutivas todo será más sencillo, y desde el cuadro de Alejandro Menéndez se vería el futuro con más luces al final del túnel.
La próxima jornada llega el Mirandés, un equipo que está haciendo muy bien las cosas desde hace varias temporadas, y que este curso está coqueteando con los puestos de playoffs. El conjunto burgalés sorprendió la temporada pasada con una excelsa participación en Copa del Rey que le llevó hasta semifinales, pero lo que le da de comer es la competición doméstica, y este curso pueden seguir soñando con luchar por un hipotético ascenso.
Por estos antecedentes, no parece el rival propicio para que el Albacete comience con el cambio de tendencia. Así lo estiman las apuestas de fútbol de la Liga123, que ven a los de José Alberto López como claros favoritos a seguir sumando de tres en tres la próxima jornada, aunque eso no garantiza nada.
Lo que se refleja en las previas de los encuentros, después de materializarse sobre el terreno de juego, más si cabe, ante la competitividad que se demuestra en cada entrega en la categoría de plata del balompié español. Esta competición cada año sorprende más por la máxima igualdad presente desde el principio y hasta que concluye, puesto un buen grupo de equipos luchan por el ascenso, y otros tantos por no perder la categoría.
En esta última tesitura se encuentra el Albacete Balompié este curso. En estos años la afición manchega ha experimentado un sinfín de emociones, que los ha llevado desde los infiernos de la Segunda B, a luchar por el descenso, y ahora encontrarse en un año de transición en el que la salvación es el objetivo claro.
El próximo lunes se verán las caras Albacete y Mirandés, en la búsqueda de una victoria para poder cumplir con sus objetivos marcados.