En una operación llevada a cabo en colaboración con la Policía Judiciaria de Portugal, agentes de la Policía Nacional han logrado desmantelar un grupo delictivo que se especializaba en el robo de relojes de lujo utilizando motocicletas.
Cuatro individuos han sido arrestados: uno en Toledo y tres en Portugal. Gracias a la localización de las placas de matrícula que empleaban en los robos, se han logrado esclarecer 15 delitos perpetrados en el país vecino. Las motocicletas que utilizaban contaban con placas "dobladas" y, al actuar en áreas de ocio, amenazaban a sus víctimas con armas de fuego.
La investigación comenzó tras enterarse de la posible existencia de una banda criminal dedicada al robo de relojes de alta gama. Este grupo, que opera principalmente en Toledo y Madrid, estaría llevando a cabo sus actividades delictivas en Portugal, según ha comunicado la Policía en un comunicado de prensa.
De manera rápida, los agentes iniciaron las primeras investigaciones, revelando que el grupo estaba compuesto por cuatro hombres. En todas sus acciones delictivas, se podía observar un patrón en su forma de actuar: primero, elegían a la víctima en áreas de entretenimiento, optando por aquellas que llevaban puestos relojes de marcas reconocidas.
Después, las víctimas eran amenazadas con armas de fuego para que les entregaran las piezas de relojería, utilizando la violencia si era necesario. Una vez que lograban su objetivo, se daban a la fuga rápidamente en motocicletas con las placas dobladas, manteniendo siempre sus rostros cubiertos por los cascos para eludir una posible investigación policial.
El once de octubre pasado, los investigadores observaron que los miembros de este grupo se trasladaban en un vehículo de alta gama hacia Portugal. En consecuencia, se organizó un operativo policial en colaboración con las autoridades de ese país.
Finalmente, se logró la detención de tres miembros del grupo en la localidad portuguesa de Portel. Para lograr la completa desarticulación de esta organización criminal, las autoridades portuguesas emitieron una Orden Europea de Detención y Entrega para el cuarto integrante. Este fue localizado y arrestado en la ciudad de Toledo, siendo posteriormente entregado a las autoridades de Portugal.
Durante el operativo, se intervino un vehículo de alta gama, que era utilizado para llevar a cabo los delitos. En su maletero, se encontraron dos placas de matrícula que permitieron establecer una conexión entre el grupo criminal y hasta 15 acciones delictivas.