Este sábado, un total de 25 provincias estarán bajo aviso debido a la borrasca Martinho, que traerá consigo viento, lluvia, nieve y, especialmente, olas. Según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), las regiones que sufrirán las condiciones más adversas serán Asturias, Cantabria, Galicia y País Vasco, todas ellas en nivel naranja por el oleaje.
AEMET anticipa que la inestabilidad vinculada a la borrasca Martinho se mantendrá, lo que resultará en cielos nubosos o cubiertos en gran parte del país este sábado. Además, se esperan precipitaciones, principalmente en forma de chubascos que vendrán acompañados de tormentas ocasionales.
Se emitirán avisos por olas en diversas localidades, incluyendo Gran Canaria, La Palma, La Gomera, El Hierro y Tenerife (Canarias). También se verán afectadas la costa de Melilla, así como las provincias de Castellón (en la Comunidad Valenciana), la costa del Valle del Guadalentín, Lorca y Águilas, además de la región del Campo de Cartagena y Mazarrón (en la Región de Murcia). Por otro lado, las provincias de Girona y Tarragona (en Cataluña) también recibirán avisos, al igual que Almería y Granada (en Andalucía).
Se emitirán avisos por viento en varias provincias, incluyendo Almería, Granada y Jaén de Andalucía; así como en Zaragoza de Aragón; Soria de Castilla y León; y en las provincias de Albacete y Guadalajara de Castilla-La Mancha. Además, en el archipiélago canario, se registrarán avisos para Gran Canaria, La Palma, La Gomera, El Hierro y Tenerife.
Por otro lado, el aviso por lluvias afectará a Huesca en Aragón, al igual que a la provincia de Ávila. Asimismo, por la presencia de nieve, estarán bajo aviso tanto León como Zamora en Castilla y León, así como la zona de la Cordillera y los Picos de Europa en el Principado de Asturias.
Las costas de los litorales oriental y occidental asturianos (Principado de Asturias), así como la costa del litoral cántabro (Cantabria), y las provincias de A Coruña, Lugo y Pontevedra (Galicia) estarán en aviso naranja por olas. Además, también se incluye a Guipúzcoa y Vizcaya en el País Vasco.
En diversas regiones, se espera que las precipitaciones sean no solo persistentes, sino también posiblemente intensas en áreas específicas como el noroeste peninsular, el oeste del Sistema Central y partes de los Pirineos. En esos lugares, es probable que se registren acumulados significativos. En contraste, en la fachada oriental, la probabilidad de chubascos será baja.
En relación con la nieve, el organismo estatal informa que se prevén nevadas en los principales sistemas montañosos de la mitad norte y del sureste de la península. La cota de nieve se situará entre 1000 y 1400 metros (m) en el noroeste, mientras que en otras áreas estará por encima de 1800 m, descendiendo hasta los 1200/1500 m. En las Islas Canarias, se anticipan cielos nubosos con precipitaciones débiles en el norte y períodos de nubes en el sur.
Asimismo, se anticipan rachas de gran intensidad en las montañas del tercio este peninsular. Por otro lado, en Canarias, se espera que el viento del norte se establezca de manera moderada, aunque con posibles intervalos de fuerza y rachas muy intensas en las vertientes más expuestas de las islas con mayor relieve.
Según la AEMET, este sábado se esperan vientos moderados provenientes del sur en la Península y en las Baleares. En el Estrecho y el Alborán, los vientos serán de componente poniente, con una tendencia a cambiar hacia el oeste en las vertientes atlántica y cantábrica.
Así, se anticipan intervalos de vientos fuertes y rachas muy intensas del noroeste en los litorales de Galicia, así como del oeste en los litorales del Cantábrico. También se prevén rachas del oeste y suroeste en las costas del Mediterráneo, abarcando desde el Estrecho hasta el cabo de la Nao, y del suroeste en los litorales peninsulares del Mar Balear, además de zonas como el Ampurdán y el sur de las Baleares.
Según el pronóstico, se espera que las temperaturas máximas disminuyan en la Península y en las Baleares, mientras que en Canarias no se anticipan variaciones significativas. Por otro lado, las temperaturas mínimas experimentarán un descenso en toda la Península, pero permanecerán sin cambios en ambos archipiélagos. Como resultado, se prevé que las heladas se extiendan a las áreas elevadas de los principales sistemas montañosos situados en la mitad norte y el sureste.