Redacción | Sábado 16 de agosto de 2025
“A mí se me va un amigo, eso lo puede asumir en la vida, pero no se nos va un referente. Ahí va a quedar”, ha enfatizado García-Page, al tiempo que ha augurado que “su huella va a ser muy importante” porque se correspondía “su talla personal con su talla política”
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha recordado hoy a Javier Lambán como una persona “muy cabal y muy honesta”, valores que le llevaron a ser “especialmente coherente en los momentos en donde lo cómodo te llevaría a estarte callado, a no hablar, a no hacer nada. Creo que él sintió un impulso moral de ayudar de verdad a su tierra, Aragón, de ayudar también a sus ideas, las del PSOE, y de ayudar por encima de todo a España”.
García-Page, que ha asistido este sábado a la localidad zaragozana de Ejea de los Caballeros para despedir al expresidente aragonés, ha lamentado profundamente el fallecimiento de un “amigo”, con quien ha asegurado que no solo compartía “multitud de enfoques de objetivos, de principios y de valores, sino que éramos amigos de batalla y compañeros de fatigas, que no siempre es lo mismo”.
A su juicio, Lambán es “un ejemplo” y, por ello, “muchos nos proponemos honrarlo de ahora en adelante, no solo recordándolo, sino poniendo en valor su capacidad intelectual que, para mucha gente que a lo mejor que no le conocía de cerca, pasó desapercibida, pero que era enorme”. También el presidente castellanomanchego ha destacado que, durante toda su trayectoria, el también exsenador defendió “desde la socialdemocracia, desde los valores de la izquierda, lo que no sólo hemos reflejado entre todos en la Constitución española, sino lo que él realmente creía que tenía que seguir siendo el norte de un país en el que creía y al que yo creo que amaba como amamos”.
“A mí se me va un amigo, eso lo puede asumir en la vida, pero no se nos va un referente. Ahí va a quedar”, ha enfatizado García-Page, al tiempo que ha augurado que “su huella va a ser muy importante” y el legado que deja “va a ser inmenso porque se correspondía su talla personal con su talla política”.
A preguntas de los medios sobre el espíritu crítico de Lambán, García-Page ha defendido que “los partidos políticos, el PSOE, tienen etapas que van y que vienen”, pero lo verdaderamente importante “es mantener valores y referencias que les serán útiles a Aragón, también a los socialistas de Aragón en el futuro y a los españoles”.
“La coherencia tiene que tener un lugar muy destacado”
En este mismo sentido, el jefe del Ejecutivo castellanomanchego ha lamentado que en la actualidad “casi es una moneda que no tiene curso legal el poder decir que una persona es coherente, que lo es porque dice las mismas cosas en las que piensa, pero que lo es, especialmente, porque no había enorme diferencia entre su vida personal y la vida política”.
Así, ha destacado que Lambán se dedicó a la política “pudiendo hacer mil cosas más”, pero lo hizo por vocación. “Yo me incluyo también en esa categoría de personas que nos hemos metido en esto por vocación. La ha llevado hasta sus últimos minutos, hasta sus últimos segundos. Yo creo que la coherencia, sobre todo cuando se tienen muy claras las ideas y los valores, tiene que tener siempre un lugar muy destacado en la huella que deja una persona y por eso no tengo duda de que será una huella muy grande”. ;
Finalmente, Emiliano García-Page se ha referido a la última conversación que “hace muy pocos días”, mantuvo con Javier Lambán, una charla en la que, según ha señalado, hablaron sobre la situación general del país y como sería la vuelta del verano, “pero sin entrar en profundidad, porque siempre que nos llamábamos agotábamos tiempo también en saber cómo estaba la familia”. A ellos les ha dedicado García-Page sus últimas palabras, “porque sinceramente, nos sentimos como de la familia”. ;