Redacción | Domingo 09 de noviembre de 2025
El Juzgado de Albacete juzgará a siete individuos franceses y belgas acusados de formar una organización criminal para cultivar y traficar marihuana en varias provincias. La Fiscalía pide 150.000 euros y más de cuatro años de prisión por delitos relacionados con la salud pública y defraudación eléctrica. Se incautaron 5.000 plantas y equipo especializado.
Este lunes, 10 de noviembre, el Juzgado de lo Penal número 1 de Albacete llevará a cabo el juicio contra un grupo de siete individuos, quienes son de nacionalidad francesa y belga. Estos están acusados de haber constituido una organización criminal dedicada al cultivo y tráfico de marihuana en la provincia de Albacete, así como en Murcia y Alicante. La Fiscalía, por su parte, ha solicitado una pena que asciende a 150.000 euros y más de cuatro años de prisión por estos delitos.
La Fiscalía califica los eventos como un delito menor relacionado con la salud pública, así como también como pertenencia a un grupo criminal y defraudación del suministro eléctrico.
De acuerdo con lo expuesto en el texto de la acusación, en febrero de 2020, los procesados contaban ya con varios inmuebles arrendados en la localidad albaceteña de Hellín, así como en las dos provincias adyacentes. Estos espacios estaban preparados para el cultivo intensivo de plantas en interiores, equipados con sistemas de ventilación, instalaciones avanzadas de iluminación y control de temperatura.
En una operación llevada a cabo por los agentes del Cuerpo Nacional de Policía, se encontraron aproximadamente 5.000 plantas de marihuana durante la entrada y registro en diversas instalaciones. Estas plantas estaban distribuidas en una nave industrial ubicada en Hellín, así como en tres viviendas situadas en las localidades murcianas de La Azacaya, La Seca y Archena, además de otra nave en Orihuela, que pertenece a la provincia de Alicante.
Se lograron incautar casi 16 kilos de cannabis sativa, que, según estimaciones, podría haber alcanzado un valor aproximado de 80.000 euros en el mercado ilícito. Además, se hallaron varios cientos de luces halógenas, ventiladores, transformadores de corriente y focos en las instalaciones, lo que ocasionó a la compañía eléctrica una pérdida cercana a 65.000 euros.