El proyecto ‘La Moto2’ se prueba en el Circuito de Albacete con Adrián Bonastre

Hace diez años que Pepe Burgaleta, director de la revista La Moto, dijo que no volvería a embarcarse en un proyecto competitivo en su vida. Aquella aseveración rotunda debería haber incorporado un “a no ser que…”. La excepción llegó cuando la redacción de esta revista especializada del grupo Motociclismo planteó la posibilidad de que los lectores, a través de redes sociales, correos y mensajes, construyeran una motocicleta de competición única, en la que desde el carenado hasta la última tuerca expresara las ideas de los aficionados.

Así, mes a mes, con esos mensajes se ha ido construyendo, primero sobre el papel y luego en la realidad. La única condición era crear una moto no convencional, sin horquilla delantera. De esta forma, el resultado se convertía en mucho más imaginativo y también más complicado. Los aficionados comenzaron a aportar sus ideas y trabajos desde unos planos hasta un modelado en 3D o los ensayos virtuales.

Algo que parecía una locura hace unos años, al fin se ha hecho realidad y este fin de semana lo pudimos comprobar en el Circuito de Albacete. Aquí el equipo de “la Moto2” hizo los primeros ajustes a esta montura que pilotará el valenciano Adrián Bonastre desde este próximo fin de semana en Motorland (Aragón) con motivo del FIM CEVRepsol.

Sobre la confección de la moto, el propio Pepe Burgaleta nos explica que “hasta 500 personas han dado su opinión o aportado sus diseños, aunque al final el grupo de especialistas final se ha reducido hasta una docena. El tubo de aire es diseño de gente de la universidad; la carrocería es de un chico que trabaja en Giuggiaro; las suspensiones son de un especialista que lleva años en las carreras. Todos son gente que le encanta el mundo de la moto y que tenía la ilusión de participar en la construcción de una unidad para la competición”.

Burgaleta reconoce que la moto es “bastante rara, partiendo de una parte delantera distinta que le da esa imagen tan espectacular con los cuatro basculantes que tiene delante, con dos horquillas y el chasis por debajo, pero es la moto que queríamos entre todos y no podía ser convencional”.

En lo que más habrá que trabajar para su puesta a punto parece ser en el peso ya que “tiene quince kilos de más y hay que quitarle –como mínimo- seis o siete hasta dejarlo en el peso que habíamos planeado. La moto tiene más rigidez que una convencional por una cuestión de seguridad; no queríamos que nos diera sorpresas por deformaciones o roturas a la hora de rodar”.          

Adrián Bonastre al mando

Para pilotar esta especial montura y extraer el máximo rendimiento de cara a la competición, el equipo de ‘La Moto2’ ha pensado en alguien con experiencia, y ese alguien es Adrián Bonastre, que tras quedar fuera del Team Suzuki del CEV, se ha embarcado en este particular proyecto.

Él mismo nos confesaba que le gusta “porque es totalmente español. Salvo el motor que es Honda, todo lo demás es fruto de lo que cada uno ha ido aportando a la revista y aunque tenemos mucho camino por delante, es muy bonito porque hay mucho margen para trabajar”.

Bonastre sabe que de momento será complicado estar arriba “porque hay muchas incógnitas. Calculamos estar a unos cuatro segundos del mejor tiempo de Moto2 en Aragón, pero como hay tanto margen de mejora, a ver si cuando vengamos a Albacete el próximo mes de julio podemos estar un poco más cerca de los de arriba”.

La de este fin de semana en Motorland será la segunda prueba puntuable del FIM CEVRepsol. Antes se disputaron Le Mans (solo Moto3) y Jerez. En este mes de junio el circuito de Catalunya vivirá la cuarta y Albacete abrirá el mes de julio (4-5-6) con las categorías de Moto3, Moto2 y SBK (2 carreras).

Para este interesante prueba de Motorland del fin de semana, el Circuito de Albacete estará representado por Raúl Martínez (SBK) y la toledana María Herrera, firme candidata al título en Moto3.