que se encaminan hacia una huelga general en todo el país en defensa de los salarios y derechos de convenio. En Castilla-La Mancha, el conflicto afecta a unos 4.500 trabajadores de las comarcas de Almansa (Albacete) y Fuensalida (Toledo)
Después de medio año de paralización de la negociación del convenio, la patronal ha vuelto a la mesa de negociación con la propuesta de "incumplir" el acuerdo salarial suscrito en enero de 2013, eliminar el plus de carencia de incentivos, ampliar a los sábados la flexibilidad de la jornada y limitar los días de permiso, ha informado CCOO en nota de prensa.
El sector del Calzado tiene una importante presencia en Castilla-La Mancha, focalizada en las comarcas de Almansa (Albacete), donde emplea a unos 2.700 trabajadores; y en la de Fuensalida (Toledo), con otros 1.500.
Estas cifras aumentan en varios cientos de trabajadores más en las temporadas álgidas, a finales de primavera y principios de verano y a finales de año, han indicado Francisco Fernández Villodre (Albacete) y María Jesús Fernández Zapardiel (Toledo), dos de los representantes de CCOO-Industria en la mesa de negociación del convenio.
Villodre y Zapardiel han comenzado a preparar la celebración de asambleas en las empresas del calzado de sus respectivas provincias. El Almansa, además, habrá una asamblea general conjunta con la UGT el próximo martes, día 24 de junio. En Fuensalida, se ha convocado una concentración el lunes día 30.
Los sindicatos esperan una reacción patronal que facilite el acuerdo y evite la prolongación del conflicto. En caso contrario "nos encaminamos a una huelga general del sector", que tendría lugar a primeros del mes de julio.
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