oscila entre 1,5 y 2 litros, según la encuesta sobre 'Los hábitos de hidratación en verano de los españoles', realizada por el Centro de Información Cerveza y Salud y Madison Market Research. Según la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria, las necesidades hídricas diarias para mujeres y hombres deberían ser 2 y 2,5 respectivamente.
Según ha informado el Centro de Información Cerveza y Salud en un comunicado, la fuente principal de hidratación debe ser el agua, si bien se puede completar la ingesta con otras bebidas como la cerveza, tanto tradicional como sin alcohol, ya que por su composición es una alternativa saludable en la aportación de líquidos para la hidratación del organismo.
Según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología, AEMET, este verano será uno de los más calurosos de la década y en Castilla-La Mancha las temperaturas serán muy similares a las del año pasado, en el cual se llegaron a alcanzar máximas de 42ºC, lo que implica que durante la llegada de las fuertes temperaturas es necesario un mayor aporte de líquidos para el organismo y así evitar la deshidratación.
El agua es la bebida más consumida en verano entre los encuestados (100 por ciento), y cerca de un 58% de los castellano-manchegos eligen también la cerveza de forma moderada como bebida para combatir las altas temperaturas.
Consumida moderadamente, la cerveza puede considerarse una bebida hidratante dado que su composición es en su mayoría agua y carbohidratos. Entre éstos se encuentran las maltodextrinas, las cuales contribuyen a facilitar la absorción del agua en el tubo digestivo.
Existen diferencias territoriales en la percepción de las necesidades hídricas, de hecho, según la encuesta, las comunidades del norte perciben que las cantidades ideales de líquido diario son inferiores a 1,5 litros. En cambio, las comunidades de la meseta y del Mediterráneo son las regiones que en mayor medida señalan que un consumo ideal debería ser superior a los 2 litros diarios.
Por otro lado, los datos de la encuesta sobre cuando beben los castellano-manchegos apuntan a que un 54 por ciento solo lo hace cuando tiene sed, frente a un 45 por ciento que lo hacen regularmente. En este caso, los resultados nacionales reflejan que las mujeres suelen beber más regularmente, frente a los hombres que suelen beber solo cuando tienen sed.
Un 73 por ciento de los castellano-manchegos reconoce que se preocupa más en verano que en invierno por mantenerse hidratado. A pesar de que el 83 por ciento de los castellano-manchegos encuestados conoce los efectos adversos de una mala hidratación, solo el 30 por ciento sabe que la necesidad hídrica del organismo es superior a 2 litros diarios.
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