Muchos seguimos pensando eso y salvo excepciones hay mucha gente en política sin oficio ni beneficio cuya única profesión es ser político y fuera de ese ámbito no son nada. Hay otros (y otras) que llegan a la política para adquirir notoriedad y luego aprovechar eso pasados sus años políticos.
Creo que los menos llegan a la política con ideas para cambiar y mejorar el mundo de las gentes a las que conocen o no pero les ha dado su voto.
Hoy en día hemos visto que la gran mayoría son esclavos de las mentiras de sus ‘jefes’. En el PSOE estamos viendo como la gente está obligada a ‘tragar’ con las mentiras, las falsedades y la manera hipócrita de hacer política de su ‘rey salvador’ Pedro Sánchez. El más mentiroso de los políticos que hemos podido conocer en décadas, esclavo este de sus ansias de poder, de estar en la Moncloa, de ser presidente cueste lo que cueste.
En sus mentiras y su forma de hacer política ha arrastrado a todos los socialistas de España, al menos a los que temen por su cargo, ya sea un concejal de pueblo o un diputado o senador. Nadie ‘se le mueve’. Todos dan su ok a lo que dice, incluso algunos tienen la desfachatez de ser tan hipócritas de contarnos las mismas mentiras, las mismas falacias, las falsedades inventadas por Sánchez y sus asesores directos.
Que diga Pedro Sánchez o hasta Ábalos, un político que no llega a mediocre, que siempre fue oposición al socialismo valenciano, un don nadie, que no han pactado con Bildu o que la Ley Celaá no se ‘carga’ de hecho el castellano en buena parte de España, hasta lo pudo comprender, están en su papel de mentir, falsear y retorcer la verdad.
No entiendo que eso lo haga un diputado, un senador o un concejal desde Albacete, Toledo o cualquier otro punto de Castilla-La Mancha, por ceñirnos al ámbito concreto de este diario. Tampoco que lo hagan en cualquier otra parte de España.
Algún día, cuando haya elecciones, tendremos que mirar las listas y ver que estos señores que repiten para ser diputados o senadores son los mismos que aplaudieron en público, no se levantaron y callaron ante la vergüenza de pactar con los amigos de los asesino de ETA y los que pactaron con los independentistas catalanes acabar con nuestro idioma.
Sí, señores diputados y senadores de Castilla-La Mancha, ustedes que callan y otorgan, ustedes no vengan luego a pedir el voto a los españoles que sentimos que nuestro país se va a la mierda por su presidente, al que ustedes respaldan. Si tuvieran vergüenza habrían dicho algo en contra de estas desvergüenzas, no digo ya dimitir que eso no lo harán por el dinero que ingresan cada mes y el que quieren seguir percibiendo en el futuro, pero al menos alguna pequeña referencia.
No, no me pidan el voto porque ustedes a mí no me representan. Ni a mí ni a miles y miles de ciudadanos de bien de esta comunidad autónoma. Ustedes son serviles a su sueldo y al jefe de su partido. No lo son a la gente que les ha votado ni a las siglas que representan. Ustedes representan a un partido histórico, defensor de la igualdad y el pluralismo, defensor de la unidad de España, en todos los aspectos. Hoy votan en Congreso y Senado cosas que nada tienen que ver con eso.
Algún día todo esto pasara factura a ese partido al que ustedes humillan cada día de su patética vida, patética y penosa porque están en política y no se atreven a decir lo que piensan. Desgraciadamente pasará factura al partido pero no a ustedes ni a su jefe ni los aplaudidores oficiales del ‘sanchismo’. No les pasará a ustedes factura porque están consiguiendo lo que querían, cargo, poder y dinero, y a sus votantes que les zurzan.
‘Sanchismo’, esa forma de hacer política desmontando las instituciones que nos hemos dado, pactado por etarras y gente que quiere dividir a España. ‘Sanchismo’, lo peor que le ha pasado a España en toda su historia.
Si (
No(
