y aquello de que ‘piensa mal y acertaras’ se cumple más que si sumamos dos y dos.
Increíble pero cierto. Ahora es el propio Albacete Balompié el que ha pedido a la juez de lo mercantil que lleva la liquidación del club que paralice el proceso. La pregunta es si realmente los anteriores dirigentes del club o los trabajadores de la entidad tienen potestad para solicitar esa paralización del proceso, puesto que ya no están en sus cargos y son los administradores liquidadores los que se supone que están al frente de la entidad y pueden tomar todas las decisiones y no los anteriores consejeros.
Lo cierto es que con todo esto se demuestra que José Miguel Garrido no parece persona muy clara a la hora de gestionar una sociedad como el Albacete. Primero piden la liquidación sin pasar por la junta general y ahora piden que se paralice.
Según algunas informaciones es posible que el Albacete haya encontrado ahora alguna posibilidad de ingresos que hace unos meses no tenía y por eso piden ahora la paralización de la sociedad.
Es posible pensar que no ir a la liquidación sea una buena noticia para todos, para aficionados, trabajadores, jugadores y para el fútbol de Albacete. Lo que ocurre es que son demasiados cambios de rumbo y no sé si algún o algunos accionistas, a título personal o formando alguna agrupación o plataforma no deberían pensar la posibilidad de presentar alguna demanda contra Garrido y sus consejeros por administración desleal, puesto que más allá de que sea el máximo accionistas y dueño del club se debe formalmente a una sociedad que administra.
Si (
No(
