El voto en contra de los diputados del PSOE ha impedido la aprobación en el pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha de la propuesta presentada por Podemos y apoyada por el PP para eliminar los privilegios de los expresidentes autonómicos.
El único exmandatario que hace uso de estas prerrogativas es José Bono -ya que José María Barreda y María Dolores de Cospedal renunciaron a las mismas- si bien este envío hace unos meses una carta al jefe del Ejecutivo autonómico, Emiliano García-Page, para renunciar a las mismas.
García-Page ha tomado la palabra antes de la votación en el pleno del Parlamento autonómico para anunciar que la renuncia de José Bono se materializará la próxima semana.
Con ello, ha rechazado "jugar a la demagogia barata" y ha abogado por elevar este debate al resto de España y hacerlo con mayor profundidad.
En el pleno, el PP ha retirado su proposición de ley encaminada al mismo fin para apoyar la de Podemos, que era más amplia, pues incluía eliminar también los privilegios de los expresidentes de las Cortes y del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha.
El cambio propuesto en la proposición de ley presentada por Podemos afectaba a la Ley del Gobierno y del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha, cuya modificación requiere el voto de tres quintos de los diputados, es decir, de 20 diputados, por lo que era necesario el apoyo de los tres grupos parlamentarios para su aprobación.
La portavoz del grupo parlamentario socialista, Blanca Fernández, ha argumentado que esta propuesta supone "una pose electoral" y ha apostado también por abrir este debate a nivel nacional y hacer una reforma de la ley del Gobierno "en profundidad" incluyendo otros cambios, como los relacionados con el régimen de incompatibilidades.
Del mismo modo, ha avisado de que con la aprobación de esta proposición de ley de Podemos se elimina "la posibilidad de proteger" a los expresidentes, algo que ha negado el diputado del PP Lorenzo Robisco, pues ha explicado que del asunto de la seguridad se encarga el Ministerio del Interior.
Robisco ha lamentado que una vez más, por tercera vez desde 2010, el PSOE haya rechazado eliminar los privilegios de los expresidentes autonómicos y ha opinado que los argumentos que ha utilizado para votar en contra son "películas".
"Si quieren mirar a los ojos a los ciudadanos, voten a favor", les ha pedido a los socialistas el diputado del PP, que también ha exigido a García-Page que enseñe la carta que le envió José Bono con la renuncia a sus privilegios.
La actual ley establece el derecho de los expresidentes a disfrutar, tanto tiempo como hayan ejercido el cargo, de una Secretaría de apoyo (dotada con dos personas), un local, un automóvil del parque móvil de la Junta, un conductor y servicio de seguridad y protección personal.
Por su parte, el diputado de Podemos José García Molina ha reprochado a los socialistas que hayan perdido la ocasión de eliminar algo que la mayor parte de los castellano-manchegos tiene claro, con lo cual, les ha advertido de que "se están pegando un tiro en el pie", pero además, ha dicho, lo están haciendo conscientemente, aunque ha precisado que no cuestionaba el aspecto relacionado con la seguridad.
García Molina ha recurrido en su intervención a un libro de José Bono de 1995, "A vueltas con el futuro: reflexiones para la renovación del socialismo", en el que afirma que "la historia no puede ser escrita por los que dedicaron su vida a beneficiarse" y añade que, "lamentablemente, los parásitos han encontrado con alguna frecuencia a lo largo de la historia un aparato, un acomodo, un escaño o un nombramiento del que conseguir prebendas".
"Son quienes se apoltronan y yugulan las aspiraciones de los pueblos", continúa el texto del expresidente autonómico que ha leído el diputado de Podemos.
No obstante, García Molina ha subrayado que el objetivo de su grupo parlamentario no es "hablar de nadie" sino defender que "los privilegios son incompatibles con la igualdad".
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