colaboración de la DGT con los ayuntamientos por el cual se procede a la cesión de radares a los cuerpos de la Policía Local para el control de la velocidad en las vías urbanas.
La velocidad es un factor que influye en la siniestralidad vial, tanto en lo relativo a las probabilidades de sufrir un accidente de circulación, como al alcance de las lesiones o las consecuencias. Por ello, “es necesario seguir haciendo un esfuerzo en la vigilancia y sensibilización al ser muy importante para la seguridad de los peatones y ciclistas y para conseguir la disminución de accidentes o de su resultado en lo que se refiere a las personas implicadas” indica el Jefe de la Policía Local, Juan Antonio Plaza.
En este sentido, añade el responsable de la Jefatura Local de Policía que “la circulación en ciudad constituye el primero de los escenarios donde el conductor inicia la adquisición de hábitos y costumbres que, posteriormente se manifiestan en carretera, por lo que se considera de vital importancia estas actuaciones en las zonas urbanas”.