Según ha informado hoy la Delegación del Gobierno de Castilla-Laa Mancha, la investigación se inició en verano de 2016 cuando se detectaron varios robos en domicilios con el mismo 'modus operandi', que consistía en fracturar el bombín de la cerradura.
En una ocasión la rápida intervención de una dotación policial, tras la colaboración ciudadana, dio lugar a la detención 'in fraganti' de un integrante del grupo, aunque los demás huyeron.
Investigaciones posteriores condujeron a la plena identificación del resto de componentes del grupo que fueron localizados y detenidos, y en el registro del domicilio fueron intervenidas varias herramientas para cometer los hechos delictivos.