y así poder burlar las posibles inspecciones de tráfico.
La operación policial se efectuó en el barrio toledano de Palomarejos y se ha saldado con doce detenciones y la incautación de 33 papelinas de cocaína, de un peso total de 14 gramos; 2.130 euros en efectivo; dos vehículos de alta gama, y diferentes útiles y efectos utilizados para la fabricación y elaboración de los envoltorios, ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa.
La venta de la cocaína se realizaba en pequeñas dosis al menudeo en una vivienda y en ocasiones desde un vehículo que se desplazaba por diferentes barrios de Toledo y por localidades cercanas.
La investigación comenzó en la Comisaría de Toledo después de que se recabaran informaciones relativas a la existencia de un posible punto de venta de sustancias estupefacientes en una vivienda en el barrio de Palomarejos.
Los agentes comprobaron el gran movimiento de personas toxicómanas conocidas de la Policía que acudían a la vivienda, y las pesquisas determinaron la identidad de los implicados y la comprobación de que, además de las transacciones en la vivienda, el presunto cabecilla se desplazaba a diversos lugares de la ciudad y los pueblos de alrededor para realizar las ventas, lo que propició, con autorización judicial, que se registrara la vivienda.
La operación se ha saldado con la detención de doce implicados y se da por finalizada tras dos meses de investigación en la que se ha desarticulado un punto de venta en la ciudad y sus alrededores que estaba creando "gran alarma social" entre los vecinos.