Del lado de seguidores Susana Díaz es Modesto Belinchón el que expone sus razones:
Votaré por la coherencia y la responsabilidad
El próximo domingo votaré en la jornada elector al del proceso de Primarias a la Secretaría General del PSOE desde la coherencia y la responsabilidad, dos valores que aprecio en Susana Díaz, además de que ha demostrado que es capaz de ganar al PP, en situaciones muy complicadas, por más de 10 puntos de diferencia y esto no es nada desdeñable, porque el PSOE es una formación con vocación de gobierno, pero para gobernar y poder transformar la realidad social, el modelo económico y garantizar la solidaridad y la justicia social de un país, primero hay que ganar, y con Susana Díaz tenemos más opciones, porque lo ha demostrado, sabe ganar.
Pero volvamos a la coherencia y la responsabilidad. Creo que ha demostrado su responsabilidad dando un paso adelante en un momento especialmente complejo y complicado y donde quizás otros habrían optado por la tranquilidad y no presentar su candidatura, ella ha dado un paso al frente y lo ha hecho sin buscar la confrontación, procurando convencer con argumentos, apelando a la razón, que en esta situación, es el camino que presenta más dificultades, pero también el más coherente.
También en un ejercicio de coherencia, Susana, lo ha dicho en numerosas ocasiones en los diferentes actos de campaña de los últimos días, ella se siente orgullosa y corresponsable de los gobiernos socialistas de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, porque a ellos debemos, en buena parte, los mayores logros sociales alcanzados en este país, desde la creación del sistema de pensiones a la Ley de Dependencia, desde el diseño y creación de una Sanidad y Educación universales, gratuitas y de calidad a la consolidación más importante de derechos individuales, y demostrando su coherencia política, Susana Díaz, en lugar de avergonzarse de sus gobiernos, muestra su orgullo por pertenecer a su mismo partido.
Es cierto que eso lo hicimos en el pasado, el presente, pero sobre todo el futuro, exigirán del PSOE que seamos capaces de dar respuesta a los retos que ya se plantean ante nosotros, como es gestionar lo que ya se ha bautizado como la cuarta revolución industrial, la de la digitalización, poniendo los cauces para que en lugar de destruir empleo o deteriorar aún más las condiciones laborales, nos sirva para crear puestos de trabajo y mejorar su calidad y estabilidad; sin olvidar que el PSOE siempre ha tenido claro que es un partido de clase, la trabajadora, pero en el que ni sobra ni excluimos a nadie, porque todos somos necesarios, pero nadie imprescindible, salvo nuestros jóvenes, que siendo la generación mejor preparada de nuestra historia también es la que más dificultades se está encontrado para encontrar un empleo acorde a su formación, desarrollar su proyecto vital e incluso, para seguir viviendo en su país.
A todo esto debemos ofrecer respuesta, sin olvidar el principio de redistribución de la riqueza, a través de la progresividad fiscal, como medio más justo y equitativo para subsanar a través de lo público las desigualdades de cuna, o que aquellos que más necesitan de la solidaridad y el apoyo de la sociedad efectivamente los tengan, en lugar de abandonarlos en una cuneta labrada por recortes sociales y ajustes económicos, que no es sino el eufemismo tras el que se amparan el egoísmo y la insolidaridad, para acallar conciencias.
De ahí que por coherencia y responsabilidad votaré a Susana Díaz el próximo domingo y desde la convicción que es la persona idónea para que el PSOE pueda cumplir el que debería ser su único objetivo y ambición, ganar las elecciones, para desde el Gobierno transformar la realidad social de nuestro país.