En este mundo de desinformación en el que cada vez hay más medios de comunicación y web de aficionados metidos a periodistas cada día es más fácil desinformar, mentir, difamar y … quedar como un gilipollas integral cuando se escribe o dice lo que no se sabe.
La desinformación puede ser un pecado y simplemente se es inepto, pero cuando uno es inepto y tonto y se mete a listo queda como un gilipollas.
No voy a decir el nombre de la web (que no medio de comunicación, ni periódico, ni nada que se le asemeje) en el que se hablaba estos días de un club deportivo de Albacete de enorme prestigio en nuestra ciudad, en nuestra región y en toda España. No voy a decir el nombre porque sería dar publicidad a algo que no la merece.
Es simple no todos los clubes de Albacete tienen el mismo currículum, los hay que lo tienen y los hay que no lo tienen.
Cuando un tonto quiere hacerse el listo queda reflejado como gilipollas, y eso le pasó a esa persona, animal o cosa que escribió estos días en su blog de un club de prestigio internacional. Hablo de persona, animal o cosa porque es evidente que la firma ‘se olvidó’, que casualidad.
Pero no pasa nada, se pueden decir barbaridades, mentir, faltar a la verdad y decir toda una sarta de imbecilidades, no pasa nada. Se comparte por las redes sociales y ya es una “noticia”. ¿Una noticia? Será una puta mierda andando por las redes sociales, como muchas de las cosas que andan por ahí, por donde se combinan noticias y trabajo serio y mierdas en la red (serían mierdas empapeladas en caso de estar en papel, pero nadie las imprime por lo pésimas que son).
Además, resulta que detrás hay un interés particular y una guerra de otros clubes. Quiero pensar que se queda ahí, espero que no haya también discriminación, sería el colmo de la desvergüenza.
Libertad de expresión sí.
Libertad para mentir, faltar a la verdad y no saber lo que se dice…, eso no es libertad de expresión, eso es tergiversar y engañar.
Sí, reclamo mi libertad de expresión para denunciar este tipo de ataques a la verdad y a la objetividad de las cosas. No todo vale, esas mierdas hay que denunciarlas.
(Pido perdón a quien se ofenda por mi lenguaje soez y burdo. En mi defensa diré que se me revuelve el estómago de ver, escuchar o leer a tanto gilipollas)