Fortalecer la coordinación entre el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) y la Guardia Civil, y reforzar los procedimientos encaminados a la erradicación de las agresiones en el ámbito sanitario han sido dos de los asuntos abordados en la reunión que el director general de Recursos Humanos,
Iñigo Cortázar, ha mantenido recientemente con el teniente coronel Jefe de la Sección de Operaciones de la Zona de la Guardia Civil en Castilla-La Mancha.
En la reunión, que se ha desarrollado en el marco del Observatorio de la Violencia del SESCAM, del que Cortázar es vicepresidente, también ha participado el coordinador Regional del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales y vocal del Observatorio, Sebastián Sánchez.
Además de revisar los objetivos y funciones de este órgano impulsado por el SESCAM en 2018, se abordaron algunos de los aspectos relativos a la Instrucción 3/2017 de la Secretaría de Estado de Seguridad, sobre las medidas policiales a adoptar frente a las agresiones a profesionales de la salud.
El objetivo del encuentro es reforzar los contactos y la colaboración en los distintos niveles, regional, provincial, gerencia y centros de trabajo, entre los representantes del SESCAM y de la Guardia Civil, y coordinar actuaciones, tanto de manera preventiva, como ante situaciones de violencia.
El Observatorio de la Violencia del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha -integrado por la Administración regional, colegios profesionales, organizaciones sindicales y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado- permite homogeneizar los criterios en las distintas gerencias con respecto a la prevención y a la actuación en estos casos, así como detectar, prevenir y actuar en los campos necesarios para evitar o minimizar el número de incidentes.
La finalidad del Observatorio es conocer, analizar y evaluar situaciones de riesgo de agresiones al personal del SESCAM, así como proponer actuaciones de prevención y contempla, además, procedimientos para actuar frente a situaciones de conflicto y agresión, minimizar tiempos de respuesta y evaluar el nivel de aplicación, desarrollo y eficacia de los mismos.
En la reunión también se analizaron algunos puntos del Plan Perseo, el plan específico con el que cuenta Castilla-La Mancha para combatir estas situaciones, y el mapa de riesgos para priorizar actuaciones y potenciar servicios y medidas preventivas de seguridad en el ámbito territorial bajo responsabilidad de la Guardia Civil.