Esta cifra supone una disminución del 7% respecto a 2018, año en que murieron en la región 100 personas, y se sitúa lejos de la estadística de 2017, cuando en las vías castellanomanchegas se cobraron 129 vías.
Por provincias, Toledo fue la que más fallecidos registra, con un total de 29 en el ejercicio pasado, pero menos que 2018 --34-- y de 2017, cuando sus en sus carreteras murieron 50.
Le sigue Albacete, con 28 fallecidos, más del doble de los que tuvo en 2018 --11-- y en 2017 --26--, y Ciudad Real, en cuyas vías murieron en 2019 un total de 22 personas, bajando de las 25 de 2018 y de las 33 de 2017.
Mientras, Cuenca sumó el pasado año un total de 8 personas fallecidas, frente a los 20 de 2018 y a los 18 de 2017, siendo Guadalajara la que menos fallecidos tuvo en 2019, registrando 6, cuatro menos que en 2018, cuando acumuló 10, y la mitad que en 2017, cuando en las carreteras de la provincia perdieron la vida 12 personas.
DATOS NACIONALES
Un total de 1.755 personas perdieron la vida en accidentes de tráfico durante 2019, según el balance definitivo de la Dirección General de Tráfico (DGT), que ha publicado esta semana, que incluye las personas fallecidas en vías interurbanas y urbanas durante los 30 días posteriores al accidente.
Esta cifra supone una disminución del 3% respecto a 2018, año en que murieron 1.806 personas, y la cifra más baja desde 2015 (1.689 fallecidos), si bien la evolución ha sido muy diferente dentro y fuera de las ciudades.
Así, en vías urbanas se produjeron 519 fallecimientos, un 6% más que en 2018, cuando perdieron la vida 489 personas. Por el contrario, en vías interurbanas fallecieron 1.236 personas, un 6% menos que en 2018, pues en ese año murieron 1.317.
No obstante, pueden observarse diferencias entre las carreteras convencionales y las autovías y autopistas. En el caso de las convencionales, se registraron 896 víctimas mortales, frente a las 994 del año anterior, lo que supone un descenso del 10%.
Se trata de la primera vez que el número de personas fallecidas en carreteras convencionales se sitúa por debajo de las 900 víctimas. En este sentido, la DGT destaca que el 29 de enero de 2019 entró en vigor la reducción del límite de velocidad de 100 km/h a 90 km/h en toda la red de vías convencionales.
Mientras, las autopistas y autovías registraron un aumento del 5% en mortalidad vial, con 340 fallecidos, cuando en 2018 se contabilizaron 323.
Otro de los datos que recalca Tráfico es que los muertos en accidentes ocurridos en ciudades supusieron el 30% de todos los fallecimientos, el porcentaje más alto desde que se dispone de registros.
Según el balance, la tasa de mortalidad en 2019 se situó en 37 personas fallecidas por millón de habitantes, por delante de Austria (46), Francia (48), Italia (55), Bélgica (56) y Portugal (61). La tasa media de los países de la Unión Europea se situó en 51.
El valor de 37 es el objetivo indicado en la Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020 como tasa de mortalidad máxima en 2020. Aun así, la DGT advierte de que 5 personas fallecen al día en accidentes de tráfico, lo que "demuestra que existe todavía un largo camino por recorrer".
MÁS DESPLAZAMIENTOS, MÁS COCHES Y MÁS CONDUCTORES
El descenso en las cifras de fallecidos se produjo en un contexto de aumento de los desplazamientos de largo recorrido, un 2,6% más que en 2018, llegando a alcanzar los 427 millones de desplazamientos.
Además, el parque automovilístico se situó en 35.855.460 vehículos, un 2% más que en 2018, la expedición de permisos de conducir aumentó un 11% y el censo de conductores fue de 27.311.015, un 2% más que en 2018.
"Estos datos nos indican que vamos a tener que concentrar los esfuerzos en las ciudades y, en especial, en la protección de los usuarios vulnerables", señala el director general de Tráfico, Pere Navarro.
Junto con los datos consolidados de siniestralidad mortal, se estima que en 2019 se produjeron en España un total de 104.077 accidentes de tráfico con víctimas, en los que, además de las 1.755 personas que perdieron la vida, 139.379 resultaron heridas, de las cuales 8.605 requirieron ingreso hospitalario.
CARACTERÍSTICAS DE LA SINIESTRALIDAD
Por medio de desplazamiento, los mayores incrementos de siniestralidad en 2019 se produjeron entre los ciclistas (80 fallecidos, frente a 58 en 2018) y motoristas (466 fallecidos, incluidos ciclomotores, un 11% más que en 2018).
Mientras el incremento de ciclistas fallecidos se concentró en vías urbanas (32 fallecidos en 2019, frente a 15 en 2018), el de motoristas tuvo lugar en vías interurbanas (318 fallecidos en 2019, frente a 276 en 2018). La cifra de motoristas fallecidos es la más alta desde 2010, mientras que la de ciclistas es la más alta desde 2007.
Con respecto al resto de medios de desplazamiento, destaca la reducción del 12% de las personas fallecidas en turismos.
Por su parte, 381 peatones fallecieron en 2019, frente a 386 en 2018. En conjunto, los usuarios vulnerables (peatones, ciclistas, motoristas) suponen por primera vez más de la mitad de las personas fallecidas (en concreto, un 53%).
Por edad, las personas de 65 años y más (que suponen el 19% de la población) representaron un 28% de las víctimas mortales. Destacan las reducciones que se han producido en la franja de edad comprendida entre los 15 y los 44 años, y los aumentos registrados en la franja de 45 a 64 años.
En lo que se refiere a accidentes más frecuentes, en vías interurbanas siguen siendo las salidas de vía (un 41% de las personas fallecidas) y las colisiones frontales (un 27%). Es en estas vías donde ha aumentado la siniestralidad de motoristas, que supusieron 1 de cada 4 personas fallecidas. En conjunto, los usuarios vulnerables suponen un 40% de las víctimas mortales en vías interurbanas. Las víctimas mortales dentro de turismos disminuyeron un 13%, situándose en 579 personas fallecidas.
En vías urbanas, los usuarios vulnerables supusieron el 82% de las personas fallecidas, repartidos del siguiente modo: 247 peatones, 32 ciclistas y 148 motoristas (incluidos ciclomotores). En todos los casos, se produjeron aumentos en 2019 respecto a 2018.
Otro dato que destaca la DGT es que el 70% de los peatones fallecidos tienen 65 años o más, destacando el incremento a partir de los 75 años, población que ha pasado de 104 fallecidos en 2018 a 134 en 2019.
Asimismo, por cuarto año consecutivo, las distracciones fueron el factor concurrente más frecuente en accidentes mortales (presentes en un 28%), seguidas del consumo de alcohol (presente en un 24%) y la velocidad (23%).
Por comunidades autónomas, Aragón, el Principado de Asturias, Islas Baleares, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Galicia, Región de Murcia, Comunidad Foral de Navarra y la Comunidad Valenciana, son las comunidades que redujeron el número de fallecidos en accidentes de tráfico respecto al año anterior, así como Ceuta y Melilla.