La Fiscalía solicita siete años y cinco meses de prisión para un hombre en Albacete acusado de maltrato y agresión sexual hacia su pareja. Durante su convivencia, la víctima sufrió constantes abusos físicos y psicológicos. El juicio se realizará el próximo martes en el Juzgado de lo Penal número 2.
La Fiscalía ha pedido una pena de siete años y cinco meses de prisión para un individuo que enfrenta cargos por maltrato y agresión sexual hacia su pareja en Albacete, durante el tiempo que convivieron en el hogar del acusado. El juicio se llevará a cabo el próximo martes en el Juzgado de lo Penal número 2 de Albacete.
De acuerdo con el contenido de la acusación, en abril de 2019, el procesado inició una relación con la víctima. Durante este tiempo, ella fue sometida a “constantes malos tratos”, que incluían “insultos, vejaciones y agresiones físicas”, aunque estas últimas no provocaron heridas o lesiones específicas.
En una de estas circunstancias, después de casi un año juntos, la mujer decidió no tener relaciones íntimas con él. Ante esta negativa, él reaccionó rompiendo varios platos de comida y, además, la tomó del brazo en un intento por sacarla de su hogar.
Durante meses, la situación se prolongó y generó una "atmósfera de violencia, temor, control, menosprecio y humillación". En este contexto, el hombre, impulsado por sus celos, llegó a llamar al sobrino de la víctima para investigar en todo momento dónde se encontraba su pareja y con quién estaba. Él expresó que "es costumbre de los españoles decidir con quién sale y a dónde va" su mujer.
Al entrar al dormitorio para recoger algunas de sus pertenencias, la víctima fue arrojada a la cama por el acusado, quien intentó realizarle tocamientos por encima de la ropa, ignorando los esfuerzos de resistencia de la víctima.
La acusación subraya que el procesado presionó a la mujer para mantener relaciones sexuales, a pesar de su negativa. Él justificaba su comportamiento diciendo que ella "estaba obligada" porque él le proporcionaba un lugar donde vivir y la mantenía.
Después, la víctima fue encerrada en el vestidor de la habitación por un periodo de veinte minutos. Este maltrato constante ha llevado a que ella sufra un trastorno adaptativo mixto que presenta síntomas tanto de ansiedad como de depresión.
La Fiscalía ha evaluado los hechos como constitutivos de un delito de maltrato físico y psíquico en el contexto familiar, así como un delito leve continuado de injurias y vejaciones. También se ha considerado otro delito de coacciones en el ámbito familiar y un delito de agresión sexual. Por estos motivos, se ha solicitado una condena total de siete años y cinco meses de prisión.