Detalles que hacen una boda inolvidable

Detalles de boda, celebraciones originales, decoraciones cuidadas e incluso vestimentas cambian de una boda a otra. Todo gira en torno a los contrayentes, pero también a lo que son y a lo que quieren proyectar.

Rasgos de una boda única

1. El lugar: cada vez son más las parejas que deciden contraer matrimonio (civil o religioso) en entornos naturales. Aunque parezca de película, las playas, los bosques o incluso las orillas de lagos o pantanos son una tendencia que ha llegado para quedarse. Acercarse de nuevo a la parte más ancestral es también hilo conductor para el resto. ¿Una boda en un campo de cultivo? ¿Rodeado de lavanda? ¿Y en un campo extremeño? Cáceres cada año acoge a más novios que buscan estar rodeados de los campos que producen el pimentón de la vera para luego agasajar con él a los invitados.
2. Decoración: antes bastaba con unas flores en las iglesias, el coche y con que el hotel o restaurante decorara de blanco el salón nupcial. Ahora, todo eso ha quedado más que obsoleto. Photocalls, coches de exposición, decoraciones a medida e incluso regalos originales que pueden seguir el hilo conductor de la boda, al detalle, con botellas de vino para bodas que cumplan los requisitos del paladar más exigente.
3. Personalización: si hay algo que cada vez buscan más las parejas es personalizar al máximo el tiempo de celebración de su matrimonio. Ese día, que debe ser inolvidable, necesita llevar también el sello de sus protagonistas. De ahí que cualquier detalle, desde tarjetas personalizadas que señalan el sitio donde se sientan los invitados, pasando por los regalos que se llevarán a casa estén cuidados con mimo. Para los más naturales, poder ofrecer jalea real fresca para los más gourmets hace que la celebración se alargue en el tiempo.
4. Fotografías: uno de los grandes quebraderos de cabeza era elegir al fotógrafo que cubriera tanto ceremonia como celebración. Mientras que hace años las imágenes eran mucho más estáticas, los novios de ahora buscan la naturalidad, una instantánea que represente la felicidad del momento, de ellos, pero también de los invitados. Cada vez más fotógrafos dan rienda suelta a su creatividad para poder cumplir el objetivo.