La secretaria provincial del Partido Popular de Albacete, Cesárea Arnedo, ha recordado al secretario general del PSOE en la ciudad de Albacete, Emilio Sáez, la demostración evidente de su nulo compromiso con Albacete en “innumerables ocasiones”.
De esta forma se ha expresado la secretaria provincial tras la nota de prensa que ha hecho llegar a los medios este sábado por la mañana refiriéndose al pregón que ofreció el alcalde de Albacete, Manuel Serrano, en las fiestas del barrio Medicina de la capital.
Arnedo ha lamentado que el PSOE de Albacete “tiene la piel muy fina” cuando se trata de pedir infraestructuras y mejoras para la capital, más si cabe cuando esas peticiones van dirigidas a su líder y presidente de la Junta, Emiliano García Page, donde deberían hacer un frente común con el gobierno de la ciudad para conseguir lo mejor para sus vecinos.
La popular se ha preguntado si Emilio Sáez y sus compañeros de partido “tienen algún tipo de miedo o complejo” a la hora de dirigirse al gobierno regional, ya que se han puesto de lado en todo momento a la hora de solicitar a esta administración actuaciones ventajosas para Albacete como la Autovía a Cuenca o el hospital nuevo.
De igual forma, la secretaria de los populares albaceteños ha criticado el “descaro” de Emilio Sáez cuando pide al gobierno nacional dirigido por el Partido Popular y la forma en la que se esconde y disimula cuando se trata de pedir a Page, “que tiene sumido Albacete en el más profundo olvido”.
Cesárea Arnedo ha aprovechado para refrescar la memoria del socialista Emilio Sáez, más concretamente sobre su acción en las Cortes Regionales, donde votó en contra de hasta 15 enmiendas del PP a los Presupuestos Regionales que contenían mejoras e infraestructuras para Albacete, incluida la Plataforma Logística, por lo que ha deseado que el socialista “rectifique y se ponga a trabajar por la ciudad en lugar de ser un siervo dócil para Page”.
“Emilio Sáez y el PSOE de Castilla-La Mancha y Albacete se negaron, con la votación en contra de estas enmiendas, a la puesta en marcha en la ciudad de mejoras como la construcción de una piscina olímpica cubierta, un pabellón polideportivo multiusos, el arreglo de las pistas de atletismo de la UCLM, la nueva sede del Conservatorio Superior de Música, o a que la ciudad cuente con un nuevo hospital”.
Además, la secretaria provincial ha informado a Emilio Sáez sobre la cesión de suelo por parte del Ayuntamiento para construir cuatro colegios, una residencia de mayores y un centro de salud, de los que nada se sabe en este mandato, “salvo titulares de grandiosos planes e infraestructuras invisibles que están totalmente huecos y no son más que fachada sin nada detrás”.
Sobre el Hospital de Albacete, Cesárea Arnedo ha lamentado que el gobierno regional de PSOE y Podemos se haya limitado a “maquillar ligeramente” la entrada al mismo, poniendo césped y dejando tal y como estaba una instalación que necesita una urgente remodelación para que los grandes profesionales de la sanidad albaceteña puedan ejercer su profesión en condiciones.
Acerca de este tema ha añadido que, de aquel hospital nuevo que prometió Emiliano García Page a los albaceteños en la campaña electoral de 2015, nada se sabe, “un engaño más de un gobierno regional desgastado, sin ideas ni rumbo y sumido en la más absoluta inacción” que ha provocado que la sanidad regional pase “por su época más negra”.
La popular ha mostrado por otra parte el respaldo del PP al alcalde de Albacete, Manuel Serrano, por realizar un pregón “que en ningún momento se utilizó para hacer política” sino para referirse a las necesidades de la ciudad a la que se quiere dotar de las mejores infraestructuras, algo que el primer edil albaceteño ha reivindicado en innumerables ocasiones sin tener en cuenta el color político de la administración a la que lo tenía que solicitar.
Como conclusión, ha reiterado a Emilio Sáez la posibilidad de rectificar en sus “equivocadas y precipitadas” declaraciones y trabajar por Albacete, que es para lo que lo han elegido en su partido, siendo leal a la ciudad y sus vecinos y no siendo “un súbdito de su líder político”.