Según ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa, los detenidos, vinculados a la asociación "Hogar Social", llevaban meses realizando acciones de acoso e intimidación contra la vida familiar de varios agentes de la Policía Nacional de Toledo, que estaban siendo atacados únicamente por su condición de agentes de la autoridad.
Los policías eran objeto de seguimientos, físicos y virtuales a través de las redes sociales, que constituían "misiones" o ritos de iniciación habituales para pasar a formar parte de grupos violentos, y estas acciones eran realizadas con nocturnidad y portando prendas que dificultaran su identificación.
Los investigadores también encontraron un chat de la aplicación de mensajería móvil WhatsApp en el que los miembros del grupo se jactaban de sus acciones delictivas.
La operación ha culminado con la realización de tres registros domiciliarios en Toledo, uno de ellos en la sede de la asociación ultraderechista "Hogar Social", y con la detención de cinco personas entre las que se encuentra uno de los líderes del movimiento que cuenta con un largo historial delictivo.
Además, entre los objetos intervenidos por los policías se encuentran dos armas cortas, dos machetes, una navaja de grandes dimensiones, así como caretas, teléfonos móviles y varios soportes de almacenamiento informático.