www.albaceteabierto.es
El cuádruple crimen de Patrick Nogueria en Pioz. La pregunta es si fue algo premeditado o un ataque de cólera

El cuádruple crimen de Patrick Nogueria en Pioz. La pregunta es si fue algo premeditado o un ataque de cólera

Por Redacción / Efe
domingo 28 de octubre de 2018, 13:21h

Nadie duda, ni siquiera su defensa, de que Patrick Nogueira asesinó a sus tíos y a sus primos de 1 y 4 años en Pioz (Guadalajara). ¿Lo hizo de forma premeditada o actuó empujado por el daño cerebral que su abogada alega? La sesión de mañana del juicio contra él podría arrojar algo de luz.

En el ecuador de la vista oral con jurado popular que comenzó el pasado miércoles en la Audiencia Provincial de Guadalajara, mañana proseguirán las pruebas periciales con la declaración de médicos forenses y los informes que las partes presentarán para apuntalar sus conclusiones -muy diferentes- sobre el estado psicológico del acusado.

Los hechos que se juzgan se remontan al 17 de agosto de 2016, cuando Patrick Nogueira acudió al chalé de Pioz donde vivía su tío, Marcos Campos; la mujer de éste, Janaina Santos, ambos de 39 años y procedentes de Brasil, y sus dos hijos, de 1 y 4 años, y acabó con la vida de su familia.

Introdujo los cuerpos -los de los adultos descuartizados- en bolsas de plástico y no fue hasta un mes más tarde cuando fueron descubiertos después de que se alertara del mal olor que procedía de la vivienda.

Dicen los expertos que siete de cada diez homicidios en España son "coléricos", producto de un "pronto" letal, muy diferentes a los que se pueden denominar como "instrumentales" (entre un 30 y un 40 %), que se planifican buscando una "ganancia", no necesariamente material.

Mientras, los "coléricos" son los perpetrados al "calor del momento", con motivo de una relación familiar, sentimental o circunstancial.

¿Dónde podrían encuadrarse los asesinatos de Pioz? El jurado popular, formado por siete hombres y dos mujeres, tendrá mucho que decir al respecto durante la deliberación sobre un caso más que excepcional en España. Cuatro víctimas de una sola mano y en unas pocas horas.

Antes de que el jurado se encierre a deliberar, tendrá que escuchar mañana a los peritos expertos que las partes -acusaciones y defensa- han citado para que ofrezcan su opinión sobre el estado psicológico de Nogueira, un acusado del que se han ofrecido en las sesiones celebradas hasta ahora dos caras muy diferentes.

Con los grilletes puestos -algo poco habitual en los juicios- Patrick Nogueira, de 21 años, ha escuchado como algunos de los testigos desmontaban una de las bazas que su defensa quiere jugar: la de que se entregó y colaboró con la Guardia Civil.

Así, los agentes que investigaron el caso reconocieron, por ejemplo, que el acusado les facilitó el pin de acceso a su teléfono móvil, pero éste ya había sido reseteado o borrado, pese a lo que pudieron recuperar información.

Quiere la defensa de Nogueira jugar otra baza para que sirva de atenuante en la condena que finalmente se le imponga: el daño cerebral que sufre su defendido.

Y, según su letrada, no sería ningún premio ni una "chocolatina", porque el presunto homicida -tal y como dijo en el juicio dirigiéndose al jurado- "no es como ustedes ni como nosotros", sino que padece un daño cerebral que "en cierta medida, predetermina la conducta".

No lo consideran así los letrados de la acusación particular ni el representante del Ministerio Público. "De arrebato, nada", dijo la fiscal el miércoles durante su alegato, en el que calificó a Nogueira de "calculador" y aseguró que los crímenes fueron premeditados y planificados. Un crimen instrumental, por tanto.

Mañana, los peritos podrían arrojar alguna luz sobre la personalidad de un joven deportista que, como declaró su entrenador de fútbol, "nunca tuvo ningún episodio violento, ni de ira ni en lance del juego". "Incluso, si le golpeaban, pedía perdón".

Pero ese mismo Patrick llegó a hacerse selfies con los cuerpos descuartizados de sus víctimas y que envió por WhatsApp y casi en directo a un amigo con frases como esta: "Qué risa, los niños no corren cuando los voy a matar".

Ha pedido perdón y se defendió en el juicio: "No puedo cambiar las cosas y no he elegido funcionar de la forma en que lo hice". El alcohol le hacía ver sombras que le distorsionaban la realidad, manifestó.

Alguna cosa sí ha quedado más clara en el juicio tras escuchar los testimonios de los testigos: Patrick Nogueira mantenía, al parecer, una mala relación con una de sus víctimas, su tío Marcos, y a este, su vez, no ocultó sus celos o recelos porque sospechaba que podría ser amante de su mujer.

El tribunal quiere dejar listo el juicio esta próxima semana, de un caso en el que tanto el Ministerio Fiscal como las acusaciones particulares solicitan para el acusado prisión permanente revisable, mientras que la defensa pide 7 años y seis meses por cada uno de los asesinatos de los dos niños y 5 años por los homicidios de sus tíos.

De condenarle a prisión permanente, sería la quinta ocasión en la que se aplicaría esta pena recogida hace tres años y medio en el Código Penal y que algunas grupos parlamentarios quieren derogar y otros retocar.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios