es “el plan más meticuloso con el que ha contado esta ciudad en toda la democracia, ya que engloba la participación y la implicación de todas las administraciones”.
Tras algo más de una hora de reunión y en la comparecencia ante los medios de comunicación, García-Page ha indicado que el encuentro ha resultado muy operativo y que, al margen de los ciclos políticos, “ni Ciudad Real, ni el Gobierno de Castilla-La Mancha podemos parar el Plan de Modernización de esta capital”.
El presidente ha subrayado la trascendencia de este proyecto que puede llegar a superar el desarrollo y la evolución que registró Ciudad Real con la construcción del campus de la Universidad de Castilla-La Mancha y el AVE.
Este Plan ha nacido con la finalidad de modernizar la ciudad, reciclando edificios icónicos que son historia de Ciudad Real y regenerando zonas degradadas, poniendo todo ello al servicio de los ciudadanos. El mencionado plan consta de cuatro niveles: infraestructuras para la ciudad; edificios y personas; conexiones y movilidad y edificios preexistentes.
Una de las actuaciones más relevantes para el jefe del Ejecutivo autonómico y para la que la Administración regional cuenta con el compromiso del Estado, es el de las travesías que se habilitarán para mejorar del urbanismo de la ciudad.
En la reunión han participado además del jefe del Ejecutivo autonómico y la alcaldesa de Ciudad Real, la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco; el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, el consejero de Fomento, Nacho Hernando y el presidente de la Diputación provincial de Ciudad Real, José Manuel Caballero.