A pesar de esto, es importante aprender a vivir en conjunto y a convivir con nuestros vecinos, por ello, a continuación les traemos algunos consejos que pueden ayudarles a remediar algunos conflictos que pueden presentarse a causa del ruido.
Consejos para remediar conflictos entre vecinos por causa del ruido
El ruido en una comunidad puede ser causado por diferentes causas, por ejemplo, una mascota que no para de ladrar o de maullar, equipos de trabajo que suenan muy fuerte, durante demasiado tiempo, o durante la noche, por música a alto volumen, por tocar instrumentos musicales muy alto, entre otras muchas cosas más. Si nuestros vecinos hacen ruido con alguna de las actividades comentadas anteriormente, podemos remediar esos conflictos de varias formas:
Presentando una reclamación formal. Para presentar una reclamación formal primero deben hacerse mediciones de ruido que permitan determinar si de verdad el ruido generado por nuestros vecinos no se encuentra dentro de la ley. Las mediciones acústicas también permiten construir un hogar que permita aislar el sonido para no molestar a nuestros vecinos (algo que debemos tomar en cuenta si somos músicos, si nos gusta escuchar música a alto volumen, entre otras cosas). En último caso la reclamación formal puede incluso convertirse en una denuncia.
Conversar con nuestro vecino. Claramente el primer paso para tratar de remediar un conflicto es conversar con nuestro vecino para tratar de que reduzcan el ruido de forma amistosa y sin la necesidad de presentar ningún tipo de reclamación normal. El problema es que esta solución normalmente no funciona y por ello nos vemos obligados a presentar reclamaciones formales.
¿Dónde podemos presentar una reclamación formal por los ruidos sufridos?
Para presentar una reclamación formal por los ruidos sufridos podemos acudir al ayuntamiento o a la policía local (antes de presentar una denuncia, el paso final para conflictos imposibles de solucionar), pero, para hacer este tipo de reclamaciones es sumamente importante que cumplamos con dos exigencias principales:
1. Contar con un escrito en donde se detalle completamente las causas del ruido y los horarios en los cuales el mismo es realizado.
2. Tener una medición acústica que respalde nuestra reclamación formal, para ello, debemos tenemos un informe pericial acústico.
¿Para qué sirven los informes periciales sobre el ruido?
Un informe pericial acústico realizado por una empresa confiable y de terciarios (es decir, que no tenga nada que ver con ninguna de las personas que forman parte del problema) es necesario para poder presentar una reclamación formal que de verdad sea tomada en cuenta por el ayuntamiento o por la policía local. De lo contrario, puede pasar mucho tiempo hasta que el ayuntamiento decida realizar una medición de ruido y todo ese tiempo tendremos que vivir con ese ruido cercano a nuestro hogar. En pocas palabras, es mucha la utilidad de estos informes y son muchas las ventajas que pueden ofrecernos, además, si somos vecinos conscientes, podemos contratar a una empresa de este estilo para asegurarnos que nuestro hogar está lo suficientemente aislado para no molestar a nuestros vecinos más cercanos.
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