El procesado es S.M., nacido en Malí, y los hechos denunciados sucedieron la tarde del 4 de julio de 2017, después de que el procesado y la víctima se vieran frente a la Estación de Autobuses de Albacete capital, en la calle García Lorca.
Según el escrito del fiscal, ambos acordaron dirigirse a una arboleda situada en la carretera de Ayora, a fin de mantener relaciones sexuales a cambio de dinero, pero al llegar allí S.M. le dijo a la mujer que no tenía dinero y que le pagaría posteriormente.
La mujer se negó entonces a mantener relaciones sexuales e intentó marcharse, momento en el que el cliente "la empujó y la tiró al suelo, introduciéndole la mano en la boca, impidiéndole respirar", para quitarle la ropa.
Siempre según la acusación pública, el procesado le dijo a la mujer que, si no accedía a mantener relaciones sexuales, la mataría y "no se iba a enterar nadie”, y finalmente la violó, "pese a que la mujer le insistía que no lo hiciera".
La mujer denunció los hechos el 6 de julio, es decir dos días después de la agresión, a consecuencia de la cual sufrió un "absceso submandibular con extensión a tejido celular subcutáneo de región submentoniana y musculatura cervical", entre otras lesiones, y tardó 19 días en curar, quedándole como secuela una cicatriz irregular e indurada de un centímetro en la zona dañada.
La Fiscalía propone que S.M. sea condenado a 9 años de prisión por el delito de agresión sexual y año y medio más por el delito de lesiones, más 10 años de libertad vigilada, y que pague una indemnización de 7.300 euros a la víctima.
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