La consejera de Igualdad y portavoz, Blanca Fernández, ha explicado que la reordenación llevada a cabo por la Consejería de Sanidad está permitiendo “que en Castilla-La Mancha siga habiendo 971 camas libres, que no tengamos situaciones de saturación, que se estén atendiendo todas las urgencias y que la salud pública y la crisis sanitaria se esté atendiendo bien por el sistema público”, que, además, cuenta con los recursos de la sanidad privada.
La consejera de Igualdad y Portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, ha valorado de forma positiva el anuncio que ha realizado esta mañana el Gobierno de España según el cual el abastecimiento de material de protección frente al coronavirus está resuelto.
Se trata de una buena noticia “que recibimos con tranquilidad desde nuestra comunidad autónoma porque para el abastecimiento dependemos del Ministerio de Sanidad, y, si finalmente ha encontrado una solución en cuanto a la producción y compra, es una buena noticia para Castilla-La Mancha, para los profesionales socio-sanitarios y para la población de riesgo”. En estos términos se ha expresado en la rueda de prensa en la que ha comparecido junto al consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, para informar de los asuntos aprobados en el Consejo de Gobierno extraordinario celebrado dedicado a la lucha contra el coronavirus.
El Gobierno regional espera que a lo sumo en un par de días quede resuelta toda la demanda de material de protección que estaba pendiente, dado que la compra era centralizada y todos los materiales de protección estaban a disposición del Ministerio de Sanidad en una conducta solidaria para garantizar un reparto homogéneo en toda España.
En ese sentido, Blanca Fernández ha hecho una llamada en nombre del Gobierno para hacer un uso responsable de estos materiales, siguiendo lo establecido por la autoridad sanitaria que especifica claramente qué casos hay que llevar material de protección y de qué tipo. “Hay que ser muy responsable en su utilización para hacerlo cuando sea necesario, esté prescrito y sea imprescindible, pedimos que no se abuse de este material o se utilice en condiciones inadecuadas porque podemos contribuir al desabastecimiento de aquello que más hay que proteger que es el sistema socio-sanitario y a las personas más vulnerables”, ha pedido la consejera.
Los recursos de la sanidad privada, al servicio del sistema público
Blanca Fernández también ha dado cuenta de la Orden de la Consejería de Sanidad mediante la cual ha adoptado medidas para regular los centros, servicios y establecimientos sanitarios de titularidad privada, ya que tal como ha explicado, la Ley General de Sanidad faculta a las autoridades sanitarias, cuando haya condiciones de salud pública que así lo justifiquen, a establecer medidas preventivas o regímenes temporales y excepcionales de funcionamiento de la sanidad pública y privada cuando la defensa de la sanidad pública lo justifique.
En ese sentido, el Real Decreto 463, de 2020, mediante el cual se han establecido las condiciones de aplicación del estado de alarma, establece en sus artículos 8 y 12 la posibilidad de requisas temporales de bienes y que las autoridades sanitarias puedan distribuir los recursos sanitarios públicos y privados de manera eficaz para proteger en una situación de emergencia sanitaria la salud pública. Esto significa que, en estos momentos, la autoridad sanitaria de Castilla-La Mancha tiene a su disposición los medios y recursos sanitarios del territorio ya sean públicos o privados.
Reorganización de actividad sanitaria
En consonancia con esta posibilidad, ha explicado la Portavoz, la Consejería de Sanidad ha tomado las siguientes decisiones para reordenar la actividad sanitaria pública. En primer lugar, la suspensión de la actividad programada en los centros de salud y en los hospitales, suspendiendo ingresos hospitalarios programados, a excepción de aquellos que por la gravedad o porque el tratamiento se encuentre activo y por criterios clínicos no puedan serlo.
También se suspenden las pruebas diagnósticas y las consultas externas, excepto aquellas que cumplan los criterios citados anteriormente. Paralelamente, se establece un sistema para atender las consultas externas vía telefónica siempre que su naturaleza sea compatible con este sistema; aquellas que no lo sean, serán reprogramadas contactando con la persona usuaria. Por otro lado, se suspende la atención sanitaria domiciliaria a excepción en los casos que no sea posible por gravedad, criterios clínicos o porque están en tratamiento activo.
La consejera portavoz ha explicado que el Gobierno es consciente del sacrificio, las molestias y dificultades que implican para toda la ciudadanía, sin embargo, dada la actual situación “todos debemos ser muy responsables y muy conscientes de que hay que priorizar a las personas que están contagiadas por el coronavirus y que además de ese contagio se haya podido derivar alguna situación clínica compleja. Esas personas son la auténtica prioridad para el sistema sanitario y lógicamente las urgencias, porque sigue habiendo accidentes de tráfico, sigue habiendo infartos, ictus… En definitiva, sigue habiendo problemas urgentes que la sanidad pública tiene que seguir atendiendo”.
Más de 970 camas libres
Blanca Fernández ha explicado que esta reordenación está permitiendo “que en Castilla-La Mancha siga habiendo 971 camas libres, que no tengamos situaciones de saturación, que se estén atendiendo todas las urgencias y que la salud pública y la crisis sanitaria se esté atendiendo bien por el sistema público”, que, además, cuenta con los recursos de la sanidad privada, tal como ha explicado previamente.
Por otro lado, la Orden de la Consejería de Sanidad también contempla que todos los profesionales deben estar disponibles en todo momento si así lo requieren las necesidades derivadas de la evolución de la crisis sanitaria.
Para acabar, se obliga a la sanidad privada a disposición de la sanidad pública los equipos de protección individual y todos los sistemas de protección de los que disponen. En ese sentido, Blanca Fernández ha recordado que la Consejería de Sanidad ha puesto a disposición de la ciudadanía un correo electrónico para que de manera voluntaria se pudiera participar solidariamente con el Gobierno “y está teniendo muy buena respuesta; prácticamente no será necesario obligar a nadie a hacerlo, pero en cualquier caso nos hemos dado del instrumento por si fuera necesario utilizar esta obligación, porque entendemos que lo primero son las personas, la atención de esta crisis sanitaria y estar a la altura de las circunstancias”.