Así lo ha indicado, en declaraciones a Europa Press, el presidente de Cáritas en la región, Javier García-Cabañas, que ha explicado que este modelo asistencial, que sustituye al reparto de comida en bolsas, confiere "autonomía" a los beneficiarios al permitirles elegir los productos de alimentación y de limpieza que necesitan, en lugar de que sean otros los que eligen por ellos.
Tras una primera entrevista para conocer la situación de los posibles usuarios, Cáritas realiza una valoración de sus necesidades reales. Si la organización determina que necesita la ayuda, se le entrega una tarjeta que le permite utilizar este recurso, en la que se le asigna una cantidad de ayuda y una cita (día y hora) para la atención en el economato.
"Hay que tener la delicadeza de ponernos en lugar de las personas que demandan ayuda, que precisan de un trato cálido", ha añadido el responsable regional de Cáritas, que asegura que esta fórmula de reparto de ayuda, lejos de "invisibilizar" a las personas que están en situación de vulnerabilidad les otorga "dignidad".
"A veces a estas personas les puede resultar humillante, incluso sentirse estigmatizadas, por el hecho de tener que acudir a pedir ayuda. Esto sucede con más frecuencia en las zonas rurales. En las ciudades hay un mayor anonimato, la gente se conoce menos, pero duele igualmente ver las colas, en las que no hay un trato cálido", ha defendido.
"Es un modelo que está implantando la Iglesia pero que tendrían que aplicar el resto de entidades", ha insistido el presidente regional de Cáritas, que ha detallado que desde el pasado mes de mayo el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, animase a la organización diocesana a emprender una campaña de difusión y creación de economatos en los arciprestazgos "para huir del asistencialismo y de las filas en la entrega de alimentos, en la provincia de Toledo existen 17.
"Algunos están aún en proceso de apertura y se está exportando el modelo a otras provincias, como la de Albacete que tiene alguno en marcha. Mientras, Ciudad Real funciona con la entrega de vales para canjear en supermercados", ha indicado García-Cabañas, que ha añadido que en las provincias de la región donde todavía se hace entrega de alimentos en bolsa se trabaja para implantar economatos o entregas directas en tienda por medio de vales.
"RACANEO" DE AYUDAS
De otro lado, en conversación con Europa Press, ha recriminado a las administraciones que "estén racaneando" la ayuda a las familias en los momentos en que éstas, a causa del COVID-19, más lo necesitan. "En estos momentos no procede ni la incertidumbre ni denegar la ayuda", ha advertido.
Para documentar su crítica, el presidente regional de Cáritas detalla que hace apenas dos meses esta organización realizó una encuesta entre un millar de familias a las que presta ayuda y que habían solicitado el Ingreso Mínimo Vital. El resultado: solo el 15% de ellas habían obtenido una respuesta favorable, el 47% seguía a la espera y a más de un 30 por ciento se le había denegado.
"Nos hemos encontrado que en la mayor crisis de nuestra historia las personas que más lo necesitan se han encontrado sin ningún tipo de ayuda, y solo el 15% ha tenido la suerte de recibir el IMV, que parecía que iba a solucionar todos los problemas. Consideramos que es una buena respuesta si fuera real, pero está siendo irreal. Por ello, pedimos celeridad para articular otras medidas en caso de que el IMV sea denegado", ha añadido el responsable de Cáritas.
De este modo, ha vuelto a afear al Gobierno regional que haya anulado el Ingreso Mínimo de Solidaridad "que venía a resolver los problemas de las familia en necesidad extrema para pago de vivienda o compra de alimentos".
Dicho esto, Javier García-Cabañas ha ido más allá en su queja al Gobierno de Castilla-La Mancha al asegurar que desde que empezaran a pedir ayuda, cuando el Gobierno central decretó el estado de alarma, no han obtenido ni respuesta ni compromiso alguno de la Administración regional.
"Más bien al contrario. En muchos casos ha habido silencio. Cuando hemos pedido protocolo sanitario de acceso a nuestros centros para personas sin hogar que estaban en la calle no recibimos respuesta. Tampoco cuando hemos pedido material sanitario para nuestros centros de acogida, que han estado siempre abiertos, y menos a la hora de comprometer un plan económico de emergencia", ha lamentado.
"Ahora todas las organizaciones del Tercer Sector estamos redactando los proyectos que vamos a presentar a la convocatoria del Gobierno regional con cargo al IRPF, que aunque ha aumentado un pelín sigue teniendo un presupuesto muy limitado. Somos muchos para concurrir y no esperamos que el Ejecutivo lo incremente, sino que recorte, porque cada vez son más asociaciones las que concurren a esta ayuda", ha concluido añadiendo el responsable autonómico de Cáritas.