Cuenta la Historia (al menos, la de antes de que los filoetarras, con el consentimiento temerario y criminal de Pinochón ya saben, un Falcon para él y su señora y una flota o escuadrilla para sus napias, las cuales ya dan ocho o diez vueltas a la tierra, trastoquen la realidad por el deseo de su propia historia, en la que las víctimas del terrorismo etarra sean consideradas como los verdugos, y éstos como las víctimas indefensas) que allá por el año 64 dC, un Emperador Romano, Nerón concretamente, incendió Roma, o sea, le pegó fuego a la capital del Imperio Romano, mientras con sus sayas de seda y lino, se ciscaba, tocando la Lira.
Pues bien, algo semejante se está dando en este país, aun hoy, a duras penas, llamado España, guardando las distancias y la época, en el que el nuevo Nerón, a la sazón, el Pseudo-Doctor-Sánchez, Presidente del Retroproguesista Criminal Gobierno de España, se dedicaba, en el reciente tac del Estado de la Nación, se dedicó a tocar, en este caso, por actualizar, la flauta (que le pega más al presunto apolíneo inquilino de La Moncloa, por no decir, más bien, “okupa”) vomitando medidas, según él, para luchar contra la inflación y, más concretamente, para abaratar el precio de la cesta de la compra, a cada cual más grotesca, lacerante, estúpida e ineficiente para el fin perseguido, y solo con el ánimo de encender el ánimo, valga la redundancia, de sus desanimadas huestes, y sobre la base absurda y alocada lucha por arremeter contra “los ricos”, que para “Cum Fraude”, se resumen, en esos tipos que, según quien no ha dado un palo al agua en su vida y que vegeta a costa de la ciudadanía en general, mientras se refocila, miccionando y defecando en La Moncloa, viven opíparamente recostados en el sofá y fumando puros, sin que parezca que esta identificación de “ricos” aporte nada sobre los mismos y más concretamente, sobre quienes deban ser alineados bajo tal epígrafe, porque los ricos por regla general no suelen nacer por esporas y han levantado su imperio a fuerza del trabajo y el sudor de su frente y esquilmados hasta límites insospechados, pues no se conforman aquéllos con un pecata minuta, sino que su avaricia no tiene límites, por lo que no es de extrañar que el día 14 de este mes de julio y año 2.022, haya sido considerado (junto con la celebración del día nacional de Francia) como el “Día de la Liberación Fiscal”, pues hasta ese antedicho día, desde el uno de enero del corriente año, los españoles hemos estado trabajando para allegar fondos a la Caja Pública de Caudales, desde la que se trasvasan a los bolsillos de esa “casta” (esa contra la que, cuando estaban en la oposición y no habían catado la dulzura del poder los de podemos, decía que iba a luchar y, sin embargo, no ha hecho otra cosa que echar a los que antes ocupaban estos puestos para colocarse ellos y, además, con la agravante, de hacerlo con más ímpetu y mayor sangría en la Caja de todos los Españoles). Pues bien, esa es la conclusión a la que ha llegado el informe que cada año elabora la “Fundación Civismo”, a fin de mostrar cuántos días de renta/trabajo tienen que emplear los españoles para cumplir con las obligaciones con Hacienda, y en ese sentido, la citada Fundación, a través de su informe, señala que en este año 2.022 “la presión fiscal directa sobre las familias españolas ha vuelto a crecer, tal como lo ha venido haciendo desde 2.018”. No me digan, que ante estas conclusiones, no nos hallamos bajo un estado de “esclavitud”, semejante a la de los negros en el Sur de Estados Unidos de América, otrora, sometidos a las inacabables y largas jornadas laborales en la recogida del algodón, pongo por caso, y con la subsiguiente sujeción al apaleamiento o latigazos, haciéndonos creer, en contra de lo que ocurría en aquella época que nos hallamos en el mejor de los tiempos, en el que la libertad fluye como fluyen las aguas cristalinas en un manantial cualquiera. El que se lo crea, desde luego, es tonto del culo, o ya le han laminado el cerebro, y consiguientemente, el intelecto, despojado de la facultad de pensar, convertidos en una piara de cerdos o en esa masa cretinizada o idiotizada, a la que se contenta espoleándoles los derechos de bragueta y el sopicaldo penevulvar, a los que se refiere regularmente Juan Manuel de Prada. Va a ser verdad lo que en el libro “Sapiens. De animales a dioses” de Yuval Noah Harari, manifiesta Alfred García, en el sentido de que el mismo “confirma que hace 30.000 años la calidad de vida era mayor”
Así que, mientras desgranaba y vomitaba sobre el Hemiciclo, el Pseudo-Doctor-Sánchez, las (no) medidas, por ineficaces, para sacar a España y a los Españoles de la ruina, la pobreza y la miseria, mintiendo como siempre, como un bellaco, España arde por los cuatro costados, como ocurriera con la Roma a la que incendió el Emperador Nerón, claro que ya sabemos la justificación de nuestro pronombre, que las llamas de los incendios son consecuencia de la Guerra de Ucrania y de la subida de los precios de la energía eléctrica y del gas, y “pelillos a la mar”.
Por otra parte, y es ese afán de seguir minando los cimientos democráticos (si es que los tenemos), ha sacado adelante, con el apoyo de la escoria y morralla parlamentaria en la que se asienta su permanencia en el Poder, la Ley que, si Dios no lo remedia, o la propia Unión Europea, o los propios vocales del Consejo General del Poder Judicial, para hacerse con la mayoría en el Tribunal Constitucional, injiriéndose hasta la médula en el Poder Judicial, ese Poder que anhela a toda costa, a fin de que en un futuro inmediato lo libre de la condena a que se está haciendo acreedor, por encabezar un Golpe de Estado del Ejecutivo, trastocando, ilegal y criminalmente, la independencia del Poder Judicial, que va a quedar hecho unos zorros, en manos de la vehemencia y la arbitrariedad, de quien asienta sus posaderas en el inodoro de La Moncloa, dando al traste, s no lo fuera ya, con ese principio fundamental e inexcusable, para la existencia de una verdadera y autentica democracia que ya proclamará Montesquieu: Independencia del Poder del Ejecutivo, del Poder Legislativo y del Poder Judicial. Y pese a reiteradas llamadas de atención de Bruselas (hay que decir, que en la UE, también cuecen habas, de lo contrario no se explica que insten a la renovación del Consejo del Poder Judicial, ahora, cuando su composición ya está viciada de entrada, dejando para después su reforma en cuanto a la designación de los Vocales de dicha Institución, en un “muerto el perro, muerta la rabia”, y así parece desprenderse de las declaraciones de Didier Reynders, Comisario Europeo de Justicia, “Actuaremos contra España si no renueva y luego reforma el CGPJ”, cuando lo que urge es lo contrario, primero reformar y después renovar, pues de lo contrario el engendro que nazca quedará ratificado sine die, cumpliéndose de esta forma la voluntad y las intenciones de Pinochón, que, además de controlar a la Fiscalía General del Estado (aclaremos que esta plaza está okupada por Dolores Delgado, ex-Ministra de Justicia, que pasó a ocupar este cargo dejando aún caliente la poltrona ministerial, en otro alarde de saltarse la ley a la torera y de seguir laminando el Poder Judicial a favor del Ejecutivo), mas creo que la UE, a día de hoy, está descalificada para poner coto a los dislates de Pinochón, al que le dejan hacer, teniendo en cuenta que antes debe poner orden en su propia casa.
Miguel Ángel Vicente Martínez
20 de julio de 2.022