Afortunadamente, existen formas de cambiar por completo esta parte de tu hogar sin tener que hacer un enorme gasto, solo hace falta saber qué tocar y cómo hacerlo. ¿Quieres saber cómo renovar tu salón gastando lo menos posible? Te lo vamos a explicar, y te adelantamos que te sorprenderá lo poco que tienes que gastar para conseguir un cambio sorprendente.
Claves para renovar tu salón con un gasto mínimo
Hay veces que, con comprar una simple mesa madera y colocarla en el sitio adecuado, ya consigues un cambio total en el estilo e imagen que proyecta tu salón. Sin embargo, no siempre funciona. Tienes que buscar formas de cambiar la distribución de los espacios, de generar otras sensaciones y, en definitiva, de hacer que el salón parezca otro completamente diferente. Y lo cierto es que no es difícil, ya lo adelantábamos antes, puede ser algo tan fácil como económico.
Lo primero que hay que abordar son las paredes. De hecho, si quieres una renovación notoria, deberías ir mirando colores con los que pintar. ¿Buscas algo intenso o prefieres mejor algo relajado? Parte de esta pregunta, responde y a partir de ahí elige el color más adecuado. Recuerda que los tonos fuertes quitan tranquilidad, pero dan fuerza; mientras que colores más relajados y claros ayudan a sentirse parte de un entorno tranquilo y que invite al relax. Decide qué sensaciones quieres en tu salón y decide el color a partir de ahí.
Puedes pintar por tu cuenta las paredes, lo que te supondrá un gasto mínimo en comparación con contratar a pintores. Después de eso, tienes que pensar en hacer una limpieza general. ¿Qué quieres conservar? ¿Qué es lo que ya no necesitas? Haz una buena limpieza general a fondo, deshaciéndote de muebles y objetos que ya no necesites, seguramente ganarás mucho espacio, y con eso también ganarás sensación de amplitud y apertura, siempre y cuando sea eso lo que busques para esta estancia.
También es muy importante saber jugar con la luz, de hecho, debes hacer todo lo posible para aprovechar cuanto puedas la luz natural. No te olvides de lsa horas de poca luz y de cómo vas a aprovechar la luz artificial, porque no basta solo con una lámpara de techo, busca lámparas de mesa o de pie que puedas colocar en rincones estratégicos para que se pueda arrojar una luz tenue, pero acogedora. No necesitas que sean intensas, sino todo lo contrario. Piensa que, por las noches, el salón será donde termines de relajarte antes de ir a dormir.
Hemos explicado pocos puntos, pero en realidad no hace falta más para renovar tu salón. Pinta, redistribuye y busca buenos puntos de luz. Con eso, o incluso comprando algún mueble pequeño, como una mesa centro madera, el resultado final puede ser absolutamente sorprendente ya no solo a nivel estético, sino también a nivel económico. Con una inversión mínima puedes hacer que este espacio cambie por completo y que se amolde a lo que realmente buscas o, al menos, pueda llegar a parecer otro salón.