Los mejores trucos para abrir una puerta sin llaves

Si eres una persona despistada es posible que te ocurra más de una vez. En este caso, lo mejor es ser previsor y dejar una copia de la llave a un amigo o familiar de suma confianza. Pero si ya estás en este escenario no sirve de nada lamentarse, tienes dos opciones: llamar a un cerrajero (contacta con cerrajero en Valencia) o intentar abrir la puerta tú mismo.

Obviamente, llamar a un cerrajero es la opción más rápida y segura, aunque muchas personas prefieren intentarlo primero por sus propios medios antes de solicitar ayuda externa.

Métodos caseros para abrir una puerta sin llaves

En algunas circunstancias es posible abrir una puerta sin llaves y sin herramientas profesionales con ayuda de objetos que todos tenemos a mano.

Radiografía o tarjeta de crédito

Es el método más conocido y utilizado. Debes conseguir una radiografía o una tarjeta de crédito (mejor si está caducada o tiene poco valor) e introducirla entre la puerta y el marco. Luego ve deslizándola poco a poco y empuja con fuerza a la altura del pestillo mientras tiras de la puerta hacia ti.

Dicho de esta forma parece muy sencillo, pero en la práctica no siempre da resultado sobre todo si estás nervioso y es la primera vez que intentas abrir una puerta sin llave. Además, si la puerta es de seguridad lo más probable es que no consigas abrirla.

Abrir el candado de tu negocio

Si al llegar a tu local te das cuenta de que has extraviado la llave y no puedes abrir el candado, utiliza el siguiente truco: toma dos llaves fijas (las que se utilizan para apretar tornillos) y colócalas en los extremos del candado haciendo presión hacia el interior como si estuvieras usando unas tijeras. El candado se romperá y quedará abierto.

Cerrojos acorazados

Este tipo de cerrojos están diseñados para que nadie pueda abrirlos desde el exterior. La única manera de entrar en casa es desmontar la puerta, algo que puede ser necesario si la persona que está en el interior de la vivienda no puede abrir la puerta porque se encuentra enferma o si es un niño pequeño.

Forzar la puerta con una palanca

Es un método desaconsejado en la mayoría de los casos ya que destroza tanto la puerta como la cerradura. Sin embargo, en situaciones de emergencia en las que debemos entrar rápidamente para auxiliar a alguien, podría ser inevitable recurrir a esta opción.

Simplemente, fuerza la cerradura con una palanca hasta que el marco se rompa y sea posible acceder al interior. Es importante tener en cuenta que esto causará daños importantes y requerirá reparaciones posteriores.

¿Cuándo llamar a un cerrajero?

Si estos trucos no te han funcionado o tienes miedo a estropear la puerta, lo mejor es llamar a un cerrajero profesional.

Los cerrajeros están preparados para abrir cualquier tipo de puerta o sistema de seguridad. Muchas empresas ofrecen servicio 24 horas(incluso en días festivos) para responder a situaciones de emergencia.

Un buen cerrajero tratará siempre de utilizar técnicas conservadoras en primer lugar para evitar romper la cerradura. Sólo en el caso de que no lo consiga, utilizará un taladro u otro método para facilitar el acceso al interior de la vivienda.

Los métodos más utilizados por los cerrajeros son los siguientes.

Bumping

Es una técnica de cerrajería que consiste en utilizar una llave especial llamada “llave bump” que encaja en casi todas las cerraduras. La llave se golpea con un martillo con los extremos de goma. Esto hace que salten los pitones liberando el bombín para poder abrir la puerta sin dificultad.

Por desgracia, el método bumping también es popular entre los amigos de lo ajeno. Existen multitud de videos explicativos en Internet donde enseñan esta técnica y varios lugares donde comprar la famosa llave bump. Esto supone un riesgo importante para los propietarios, aunque una buena forma de protegerse es instalar cerraduras con cilindros anti-bumping que han sido diseñados para prevenir esta forma de robo.

Tarjetas especiales

También conocidas como “tarjetas shim” son láminas flexibles fabricadas en metal o plástico que se introducen entre la puerta y el marco para liberar el pestillo.

Este método solamente funciona en puertas que no son de seguridad y tienen bombines clásicos.

Magic Key

Es una herramienta tipo ganzúa con unas escobillas metálicas que al introducirse en la cerradura empuja los pines logrando que la llave gire. Es necesario tener mucha destreza para utilizarla correctamente.

Taladrar los pitones de la cerradura

Esta técnica se realiza perforando el bombín de la cerradura en el área donde se inserta la llave y luego utilizando un destornillador u otra herramienta para hacer girar el cilindro y abrir la puerta.

Es una práctica agresiva que deja inutilizada la cerradura y por eso está desaconsejada y solamente se recurre a ella en cerrajería cuando fracasan los otros métodos convencionales.

Taladrar el rotor

Es una técnica extremadamente invasiva que consiste en perforar el cilindro o rotor con el objetivo de romper los pines y lograr así que la puerta se abra sin necesidad de una llave.

Además de dejar la cerradura inservible, también puede dañar seriamente la puerta o el marco. Los buenos cerrajeros tratarán de evitar siempre estos métodos.

Recuerda que al igual que en todas las profesiones, en el mundo de la cerrajería también existe el intrusismo. Contratar los servicios de una empresa profesional siempre te dará cierto nivel de confianza y seguridad. No olvides pedir factura del trabajo realizado pues podría ser útil para futuras referencias o reclamaciones