Todos los indicios visuales sobre la imagen del Pseudo-Doctor-Sánchez, nos conducen, inexorablemente, a la conclusión de que este país, aun hoy, a duras penas, llamado España, está dirigido por un personaje rayano en el desequilibrio mental, una persona que arrastra serios delirios de grandeza, arrogándose, por comparación, con Napoleón, y quizás, más realista, con la figura del Fürer, o sea, Adolf Hitler, un ególatra y egocéntrico individuo que, por creerse guapo, se cree investido de toda la sapiencia y sabiduría de los antiguos sabios de Grecia, mas siendo esto falso de toda falsedad, el sujeto en cuestión se halla imbuido de la maldad extrema del Diablo, y si, según Javier Milei, recientemente triunfador en las Presidenciales de Argentina, el actual Papa (curiosamente, argentino también) es el representante del Maligno en la tierra, el Pseudo-Doctor-Sánchez bien puede considerarse el primer ministro de Satanás.
Engolado y creído, crecido tras su investidura, gracias a los votos de la morralla parlamentaria, incluidos, amén del Sumar de Yolanda Díaz, la “Cyrano de Bergerac Española”, PNV (que ahora arroja al fuego del infierno a su amado Urkullu, cuyo apellido suena a “Zurullo” por verle perdiendo fuelle ante la amenaza de su gran rival en Euskadi, EH-Bildu, sin olvidar al Presidente de la formación, Andoni Ortúzar, alías “Cabeza de Simio”, instalado en el último eslabón entre el primate y el homínido), ERC (a cuyo frente se entroniza Oriol Junqueras, o sea, el Michael de la película “La Hija de Ryan”, ratificando el dicho de que una imagen vale más que mil palabras a cuyo lado se alinea el ahora señorito de Madrid, Rufián, que de nombre le viene la casta al galgo), Junts per Cat. (dirigido por el prófugo de la justicia, Carlos Puigdemont, convertido en un “icono” de la ridiculez y el desafuero, pero capaz de torear y reírse a mandíbula batiente, no sólo del Pseudo-Doctor-Sánchez, sino de todos los miembros de su Gobierno, principalmente del tercero en el PSOE, Secretario de la Organización del partido Santos Cerdán, cuya carrera meteórica, le ha transportado de ser el chófer de Sánchez al cargo mencionado, dejando al descubierto al “lumbreras”, agazapado al mando del volante de un coche), BNG (partido gallego que, en su día, casi deja en la ruina a la Comunidad Autónoma de Galicia), EH-BILDU (residuo de los filoetarras, con un Otegui a su frente, ese “hombre de paz”, tal como le calificara el exPresidente, Rodríguez Zapatero, que visto lo visto habría que espetarle que ¡menudo ojo para echar lluecas!) y CC, o sea, Coalición Canaria (que estuvo bailando la yenca “izquierda-izquierda, derecha-derecha-“, acabando su desembarco en esta suma de escoria parlamentaria sobre la que apoya su nombramiento un criminal y diabólico sujeto). En fin, repetimos, lo peor de cada casa. Y con estos mimbres, urdidos entre la indolencia, la incultura y sobre todo la maldad, el odio, la envidia y el resentimiento, se forja el edificio desde el que el Pseudo-Doctor-Sánchez confía dirigir el País, levantando un muro entre los ciudadanos sumisos a sus dicterios y los que no tragan ruedas de molino, carros y carretas ni creemos que los burros vuelan.
Pero volvamos al sujeto en cuestión, al que ya le hemos calificado de ególatra y egocéntrico, y a cuyos epítetos habría que añadir los de petulante, egoísta, narcisista y endiosado, en la ensoñación particular que el mismo parece poner de relieve, bajo el paraguas de los aplausos, hasta romperse las manos y dejar caer cortados los dedos de las mismas, con que le gratifican y glorifican sus huestes, siendo el ejemplo a seguir, por su contundencia y desparpajo, los aplausos que le dedica María Jesús Montero (una fría inculta y analfabeta, como casi sin excepción, todo el equipo gubernamental), a la que da risa o miedo verla aplaudir con un entusiasmo que se sale del relato.
Y, si analizamos, los paradigmas que resaltan de la observación física del individuo, bien podríamos añadir a los epítetos enumerados en el párrafo anterior, los de psicópata, neurótico, desequilibrado, lunático, demente, trastornado, perturbado o loco, o más bien, acabando con un “y loco”, pues todos los referenciados son predicables, sin excepción, de este ejemplo de ser que orbita por las nubes y no baja a la realidad del día a día, y cuyas propuestas extremas, dimanadas de sus pactos secretos con los filoetarras y los independentistas, serían suficientes para incapacitarlo y encerrarlo en un psiquiátrico de por vida, y si es que procediera, por criminal y delincuente, dirigente de un Golpe de Estado, desde el Poder, o sea, desde el mismo Consejo de Ministros, con el afán de derogar, por sí y ante sí, el orden constitucional, como Dios Supremo que cree ser, e instaurar una dictadura bolivariana, un régimen autocrático, tiránico y dictatorial, proceder a su detención y someterle a juicio por los desmanes y tropelías que, desde su acceso al Gobierno de la Nación, ha llevado a cabo, con delitos de lesa humanidad y genocidio.
Ahora, un ejemplo, que apoya la tesis anterior, su reciente viaje a la zona del conflicto de Israel y Gaza, poniéndose chulo delante del mismísimo Presidente del país israelita, Benjamín Netanyahu, al espetarle en sus mismos morros, que “el número de palestinos muertos es insoportable, y que “el terrorismo no puede erradicarse solo con fuerza”, o que han muerto miles de niños y que debe distinguirse claramente entre objetivos militares y la protección de los civiles, en un remedo, irónicamente hablando, de la “Guerra de Gila”: ¡Señores gazatíes, les avisamos que vamos a bombardear tal y cual objetivo. Se ruega a quienes no sean militantes de Hamás, que se aparten a la izquierda o a la derecha!. Claro, que las consecuencias de estas insensateces de quien se cree poseído por el don del bien y del mal, por la piedra filosofal, ya se han visto de inmediato: Israel planta a Sánchez en su conferencia de paz en Barcelona, a la que no asistió ni siquiera la embajadora israelí, pese a estar en la Ciudad Condal. O sea, un indocumentado, fundamentalista, dispuesto a dar consejos, cuando no órdenes, a Israel, debiendo dar gracias de haber salido libre y sin una patada en el trasero dada por Netanyahu a tan insigne y desnortado visitante, marcado con la cruz de la indignidad y el oprobio, sentenciando, de por vida desde Tel Aviv: “No olvidaremos quién apoya a una organización asesina”. Por lo visto para el Pseudo-Doctor-Sánchez, es pacata minuta el asesinato, entre otros, de cuarenta o cincuenta bebés ubicados en un kibutz, a los que degollaron y decapitaron, o de esas israelíes embarazadas a las que abrieron fríamente el vientre y les extirparon los fetos, poniendo en la misma balanza esta masacre y la respuesta a la misma dada por el ejército israelí.
Y mientras tanto, “Uropa” o sea, la UE a lo suyo, que es salir por peteneras y mirar para otro lado, en el asunto de la presunta Ley de amnistía, tomando el ejemplo de la Europa en el inicio del “reinado” de Adolf Hitler, en 1.939, al que rieron, incluso, sus gracias, desembocando en la terrible Segunda Guerra Mundial, de la que nos salvó, por mucho que duela a la extrema izquierda y a a la izquierda extrema “un señor llamado Don Francisco Franco Bahamonde, Generalísimo de los Ejércitos”.
ALBACETE 29 DE NOVIEMBRE DE
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