Minuto 84, Manu Fuster cuelga un balón desde el pico del área y Juanma entra con todo para cabecear y enviar el esférico al fondo de la portería defendida por Ratti. 0-1 y el Albacete Balompié cogía nuevamente aire mientras hundía un poco más al Andorra.
Este es el resumen del enorme triunfo conseguido por el conjunto manchego este pasado domingo en el Estadio Nacional, el cual deja al Alba en la decimoquinta posición de la tabla clasificatoria con 45 puntos, cuatro por encima de los puestos de descenso.
Esta situación era impensable hace poco más de un mes, pero desde la llegada de Alberto González al banquillo este Albacete Balompié es un equipo totalmente nuevo.
Los manchegos han sumado cuatro victorias de manera consecutiva, algo que no conseguía el club en Segunda División desde hace 18 años. Además, el técnico malagueño y sus futbolistas han igualado este récord en el momento más oportuno de la temporada, puesto que las opciones de evitar caer a Primera RFEF eran muy remotas.
Salvo el Real Valladolid, que va lanzado a por el ascenso a Primera, ningún otro equipo de la categoría de plata ha logrado sumar los últimos 12 puntos. Esto deja a las claras lo complicado que es vencer a tu oponente en esta competición y el enorme mérito que tiene este cambio de dinámica en un Albacete Balompié que este próximo domingo, a las 18:30 horas, regresará al Estadio Carlos Belmonte para medirse al líder. Si los albacetistas logran derrotar al Leganés, darán un paso de gigante en su lucha por la salvación.