con intimidación que se han cometido en esta localidad.
A tres de los detenidos se les imputa ser los presuntos autores de la agresión y el robo que sufrió un hostelero de Hellín, mientras que el otro hombre detenido y la mujer están acusados de robar varias bolsas de pescado y marisco de un camión de reparto y de amenazar a su propietario cuando se percató de su sustracción.
Según ha informado hoy la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha en dos notas de prensa, los dos hechos delictivos ocurrieron el pasado 13 de agosto en Hellín.
El primero de los robos tuvo lugar a las 3:35 horas de la madrugada, cuando los tres arrestados abordaron y agredieron al propietario de un negocio de hostelería con el fin de robarle las pertenencias, cuando se encontraba en el portal de su casa después de haber cerrado el establecimiento.
Tras agredirlo, los arrestados robaron 700 euros en efectivo, documentación personal y billetes de lotería al agredido, que perdió momentáneamente la consciencia.
Las gestiones de la Policía Nacional permitieron identificar a los sospechosos de la agresión y el robo, que resultaron ser tres jóvenes dos de ellos con antecedentes policiales.
Dos de ellos fueron detenidos al día siguiente, 14 de agosto y el tercero el 15 de agosto y los tres fueron puestos a disposición del juzgado de guardia de Hellín como presuntos autores de un delito de robo con violencia e intimidación.
El juez de guardia ordenó su ingreso en prisión después de hacer una rueda de reconocimiento.
A su vez, el otro robo tuvo lugar a las 10:50 horas del 13 de agosto en las inmediaciones del Mercado de Abastos de Hellín.
El hombre y la mujer arrestados se dirigieron a uno de los puestos del mercado y mientras el varón mostraba interés por el precio de un producto y lo discutía con el vendedor, su compañera aprovechó un descuido para sustraer varias bolsas de pescado y marisco del camión que repartía la mercancía.
Uno de los propietarios del puesto se percató de lo ocurrido y vio que la mujer emprendía la huida con las bolsas que acaba de sustraer, por lo que comenzó a perseguirla.
Cuando la alcanzó, la mujer se enfrentó al propietario y comenzó a forcejear con él tras negarse a devolverle la mercancía.
Cuando estaban forcejeando, apareció el hombre que acompañaba a la mujer e intimidó al propietario del puesto con una garrota de grandes dimensiones alzándola sobre su cabeza para que los dejase marchar.
Las investigaciones policiales permitieron la identificación de los dos sospechosos, ambos con numerosos antecedentes policiales, que fueron detenidos el 17 de agosto como presuntos autores de un delito de robo con intimidación.
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