de RENFE y ADIF se concentraron el viernes por la mañana en la Estación de tren de Albacete-Los Llanos en contra de las privatizaciones y de la liberalización del ferrocarril y en defensa del sector público ferroviario y de sus puestos de trabajo.
“Este es el inicio de un proceso de movilizaciones que irán en incremento y dentro del que nos descartamos la convocatoria de huelga”, afirmó el responsable del Sector Ferroviario de CCOO de Albacete, Gonzalo Aparicio.
En una nota de prensa de CCOO se señala que en el caso de Adif, el cierre de bases de mantenimiento de infraestructura, la aplicación unilateral de modificaciones sustanciales de condiciones de trabajo, incluso funcionales, la disminución de masa salarial en retribuciones variables y en el monto destinado a política social (PACDA, campañas médicas y ayudas sociales), la falta de voluntad política y empresarial de solucionar los problemas de ubicación del canal de venta, las repercusiones en los trabajadores en la implantación del modelo de gestión de las terminales, los incumplimientos de los compromisos de movilidad voluntaria y la más que previsible imposición de movilidad forzosa, las continuas externalizaciones, etc. tienen un denominador común: “una política de recursos humanos que apuesta por la destrucción de empleo directo”.
Se añade que respecto a Renfe, el incumplimiento de la internalización de cargas, la falta de contractualización entre las sociedades del grupo, lo que pone en peligro el futuro y viabilidad de alguna de ellas, los incumplimientos del convenio, la reducción de emolumentos variables, la amenaza de cierre para 2015 de algunos talleres, la falta de concursos de movilidad, la entrada de nuevos operadores sin garantías ni convenio de aplicación, el escaso número de ingresos para atender las cargas de trabajo propias, y la más que previsible transferencia a la industria privada de las grandes reparaciones, tienen un denominador común: “una política de recursos humanos que apuesta por la destrucción de empleo directo”.
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