Desde su inauguración en julio de 1990 el Circuito de Velocidad de Albacete nunca había recibido una inversión tan importante como necesaria y que va a permitir adaptar la pista a los requerimientos de seguridad exigidos por las federaciones internacionales de automovilismo y motociclismo.
El presidente de Diputación y vicepresidente del Consorcio, Francisco Núñez, ha comentado en la presentación de este proyecto que “esto no es solo un reasfaltado de la pista sin más, sino un primer paso en la adaptación del Circuito a los tiempos que corren y que deben volver a situar al trazado como en el objetivo de equipos, pilotos y competiciones”. En especial, el mandatario provincial explicó que “debemos seguir siendo una referencia para un campeonato como el CEV que con su carácter internacional se ha convertido en el mejor trampolín para el Campeonato del Mundo”.
Núñez no olvidó que también hay que seguir abriendo el Circuito a la población de la provincia, recordando que las bases de licitación ya se han publicado en el Boletín Oficial de la Provincia y que una vez conocidas las ofertas, en un plazo muy corto comenzarán estas obras que a principios de octubre podrían estar concluidas.
Por su parte, Bernardo Montserrat, ingeniero de la empresa Hidrursa, responsable del proyecto, explicó algunos de los cambios más importantes y que se resumirían de la siguiente manera:
Asfaltado completo de la pista y ampliación de escapatorias también con asfalto.
Se acorta la recta de meta para entrar antes en la primera curva.
Se adelanta la línea de salida situándola a la altura de las tribunas.
La llamada ‘curva del restaurante’ pasa a tener un ángulo de 90º para ganar en seguridad y se convierte en un lugar más para posibles adelantamientos.
La siguiente curva, de izquierdas, cambiará su peralte para ganar en velocidad y seguridad.
Desaparece la actual chicanne y se llega a la línea de meta con dos nuevas curvas, la 13 y la 14.
El acceso a boxes desde la pista se hará desde la penúltima curva evitando así cruces en mitad de la recta de meta a baja velocidad.
En cuanto a los boxes, la modificación consiste en: prolongarlos hacia el paddock aproximadamente un 50% con nuevas puertas y se espera ganar con ello unos 900 metros cuadrados aproximadamente.
Montserrat, que también ha sido responsable del desarrollo y posterior remodelación del Circuito Ricardo Tormo de Cheste, añadió para terminar que se mejorarán los ‘pianos’ de las curvas que actualmente no tienen escalón y que deben adaptarse a la normativa internacional al respecto por lo que “el Circuito tendrá una pista inmejorable en seguridad, en espectáculo para el espectador, y en diversión para los pilotos”.
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