La investigación policial dio comienzo el pasado 1 de marzo, cuando los agentes tuvieron conocimiento de que un varón de mediana edad podría estar dedicándose a la venta de droga entre jóvenes estudiantes universitarios, según ha informado este viernes en nota de prensa la Comisaría de Policía Nacional.
Ante tales hechos, los agentes establecieron un dispositivo que les permitió comprobar que efectivamente se estaba produciendo una actividad ilícita de tráfico de drogas.
Los presuntos autores de los hechos, que ya contaban con antecedentes por delito contra la salud pública, actuaban a plena luz del día suministrando pequeñas dosis de hachís a universitarios.
En el registro que se practicó en las habitaciones alquiladas donde residían, se incautaron tres kilos de hachís, 500 gramos de marihuana, 1.100 euros en moneda fraccionada, básculas de precisión y diverso material para el corte y empaquetado de las mencionadas sustancias estupefacientes.
La Comisaría Provincial de Guadalajara continúa con las investigaciones para lograr la total desarticulación de la red de distribución de estupefacientes.