Así lo ha señalado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, durante la reunión que ha mantenido con el CEO de Alcaliber, José Antonio de la Puente, empresa referente mundial en la producción de estupefacientes que cuenta con plantas en las provincias de Albacete y Toledo, según ha informado la Junta en nota de prensa.
Alcaliber es una compañía líder en la producción de los principios activos derivados de estupefacientes para la industria farmacéutica, llegando a producir el 27 por ciento de la morfina que se utiliza a nivel mundial en la industria farmacéutica y el 18 por ciento de la tebaína, entre otros. Cuenta con 120 personas trabajando en la región, en sus plantas de Albacete y Toledo, y es uno de los mayores suministradores de principios activos derivados para su uso en la farmacia. La compañía es completamente autónoma, garantizando el abastecimiento de productos adaptados a las necesidades de la industria.
Durante el encuentro, la consejera de Economía, Empresas y Empleo ha remarcado el enorme potencial de la industria farmacéutica en la región, así como su carácter innovador y capacidad transformadora para el tejido industrial y económico de Castilla-La Mancha. Ese carácter innovador y la capacidad para generar empleo estable y de alta cualificación son algunos de los factores con los que cuenta la industria farmacéutica regional para situar a Castilla-La Mancha como epicentro del 'hub' nacional de la industria de la salud y la farmacia.
Durante la reunión, en la que han estado presentes el director general de Empresas, Javier Rosell; el director del IPEX, Luis Noé; y la directora financiera de Alcaliber, Marta del Valle; Patricia Franco ha remarcado el compromiso del Gobierno regional con el desarrollo de la industria farmacéutica de Castilla-La Mancha, y ha subrayado su carácter "esencial", que se ha puesto de manifiesto de manera más intensa desde el inicio de la crisis sanitaria.
En este marco, la consejera ha puesto a disposición de Alcaliber, y de todo el sector, las líneas de apoyo a la inversión con las que cuenta el Ejecutivo regional, así como su potencial para apalancar fondos procedentes de otras administraciones para el respaldo de proyectos de inversión; además de ofrecer todas las líneas de estímulo al empleo y a la generación de puestos de trabajo de alta cualificación con las que cuenta el Gobierno de Castilla-La Mancha para el desarrollo de su actividad.