La consejera de Agricultura del Gobierno regional, María Luisa Soriano, ha sostenido que "el sector agroalimentario es un pilar para el desarrollo económico y la generación de riqueza y empleo y, por tanto, de la recuperación económica de Castilla-La Mancha".
Así lo ha señalado esta tarde en Riópar (Albacete), donde ha asistido a la entrega de premios 'Llave del Mundo', en la que se reconoce la labor de personas e instituciones que han colaborado en la proyección de la localidad, ha informado la Junta en nota de prensa.
Soriano ha afirmado que "el Gobierno de María Dolores Cospedal es consciente del potencial de desarrollo de la economía de las zonas rurales, y por ello está trabajando de forma decidida para gestionar mejor los recursos y destinar fondos que incidan en la creación de riqueza y empleo en nuestros pueblos".
La consejera ha señalado al sector medioambiental como otra de las fuentes de riqueza para estas áreas, lo que evidencia "que el cuidado del entorno y el desarrollo económico son perfectamente compatibles siempre y cuando se siga una política de gestión adecuada de los espacios naturales".
En este sentido, ha lamentado que el anterior Gobierno socialista tan solo realizara el Plan de Gestión de uno de los 110 espacios LIC (Lugares de Importancia Comunitaria) y ZEPA (Zonas de especial protección para las aves) con los que cuenta Castilla-La Mancha, tarea que está llevando a cabo ahora el Gobierno regional y que estará concluida al final de la legislatura.
De esta forma, "lograremos que por fin se fije una gestión responsable en los espacios naturales de la región, y se les proteja para beneficio de todos los castellano-manchegos", ha señalado.
La titular de Agricultura ha destacado que el compromiso del Gobierno de Cospedal con el cuidado de los espacios naturales se ha traducido en una inversión de 378 millones de euros en esta legislatura.
Entre las inversiones, ha subrayado los 155 millones para actuaciones de prevención de incendios forestales en los espacios naturales, los 69 millones para forestación de tierras o los 25 millones para trabajos de recuperación del potencial forestal.