La sentencia, difundida por el Tribunal Superior de Justicia de la región y contra la que cabe recurso, considera culpable al acusado, de 75 años y con una condena anterior por un delito de abusos sexuales, y sostiene en los fundamentos que "no existe duda alguna" de que el procesado propuso a la menor "mantener relaciones sexuales a cambio de dinero".
Los hechos ocurrieron en septiembre de 2016, en una parada de autobús junto al parque Abelardo Sánchez de la capital albaceteña, donde el acusado "se puso al lado" de la denunciante y otras amigas menores de edad, diciendo que tenía nietos y estaba buscando a una chica para que ayudara a su hija con los niños.
Una de las menores se interesó, por lo que dos días después concertó una cita en una cafetería, adonde el acusado acudió solo.
La sentencia recoge que, a pesar de que la joven le había comentado que tenía 16 años, el acusado "comenzó a derivar la conversación a temas sexuales, diciéndole que si quería el trabajo, por el que podría llegar a ganar 300 euros al mes, tenía que tener una relación de confianza y que esa relación implicaba que tenía derecho a roce".
La sentencia indica que el Código Penal castiga esta conducta y a quien "solicite, acepte u obtenga una relación sexual con una persona menor de edad o discapacitada necesitada de especial protección a cambio de una remuneración o promesa", e impone dos años y ocho meses de prisión teniendo en cuenta la "reincidencia" del acusado.
El juez considera probado el delito y no cree sostenible la explicación del acusado y su defensa de que la menor "malinterpretó" la conversación de contenido sexual que mantuvieron.
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