Lo ha hecho gracias al acuerdo de investidura alcanzado con el PSOE, que recoge que la formación naranja ostentará la Alcaldía dos años y los socialistas, los otros dos.
Vicente Casañ se ha convertido este sábado en el primer alcalde de Ciudadanos en una capital de provincia de Castilla-La Mancha, gracias al acuerdo de investidura alcanzado con el PSOE, que recoge que la formación naranja ostentará la Alcaldía dos años y los socialistas, los otros dos.
Casañ ha recibido el apoyo de los cinco concejales de Ciudadanos y los nueve de PSOE -que fue la lista más votada el 26 de mayo-; mientras que PP, también con nueve concejales, ha apoyado al que ha sido hasta hoy regidor, Manuel Serrano.
También se han votado a sí mismos la lista de Unidas Podemos, que obtuvo tres concejales, y de Vox, con un representante.
La investidura de Casañ ha sido seguida en el salón de plenos por el secretario de Finanzas de Cs, Carlos Cuadrado; la secretaria de Acción Institucional de Ciudadanos en Castilla-La Mancha y diputada regional electa, Carmen Picazo; el secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, Paco de la Rosa; la consejera de Bienestar de Castilla-La Mancha en funciones, Aurelia Sánchez, y el presidente del Tribunal del Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, Vicente Rouco.
La anécdota del pleno de constitución del Ayuntamiento de Albacete, que ha comenzado a las 12.00 horas, ha ocurrido cuando Vicente Casañ, a la hora de jurar como concejal, ha señalado que juraba como alcalde, a pesar de que la votación aún no se había producido, por lo que ha tenido que repetir el juramento.
En su primer discurso como alcalde de Albacete, Casañ ha subrayado el "cambio histórico" que se ha producido en la ciudad, porque "por primera vez no gobiernan los de siempre", sino que "se abren nuevas oportunidades para los vecinos".
"Voy a trabajar por lograr el Albacete que siempre he soñado. Porque no creo en un Albacete de rojos o azules, sino en el Albacete de las personas", ha subrayado el alcalde de Albacete.
Entre las propuestas que ha lanzado, se ha comprometido a mejorar el "cheque escolar", "pelear" para que la ciudad tenga "un hospital de primera", bajar el IBI un 20 por ciento y potenciar el turismo de congresos.
En declaraciones a los medios de comunicación tras el pleno, Casañ ha explicado que, aunque la Alcaldía sí cambiará de signo político dentro de dos años, el reparto de Concejalías es para cuatro años y no cambiarán en 2021, si bien ha preferido no desvelar la composición del gobierno local, algo que ocurrirá posiblemente el lunes 17 de junio.
Casañ ha desvelado que Sáez será teniente de alcalde y que ambos -Sáez y él- tendrán competencias en el gobierno local, aunque tampoco las ha desvelado.
En el turno de intervenciones tras la votación, brevedad en Vox y anuncio de oposición si no hay gobierno de progreso en Podemos. La portavoz de Ciudadanos, también breve y feliz.
El exalcalde Manuel Serrano ‘tiró’ alguna ‘chinita’ al nuevo alcalde por la forma en la que llega a ese cargo. Habló de los logros conseguidos y de las muchas cosas que Casañ inaugurará y que ya están en marcha o tienen el presupuesto porque gestionó su construcción el PP.
Por parte socialista, Emilio Sáez, en un discurso largo, habló mucho del pacto entre PSOE y Ciudadanos y de salir de la “parálisis” de los últimos años. Habló de proyectos e incidió una y otra vez en el pacto.
El nuevo alcalde habló de proyecto de ‘su’ proyecto, porque no habló para nada del pacto con el PSOE que le ha dado la alcaldía. Ni una mención a ese acuerdo, pareciera que es alcalde porque sacó mayoría absoluta en las elecciones. Entre los proyectos, habló de conseguir un nuevo hospital para Albacete, mirando entonces a la cara a Emilio Sáez, su socio del PSOE.
La junta de gobierno municipal tendrá mayoría socialista pero no está decidido el reparto de concejalías.
Si (
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