En 2009, esta criptomoneda fue el primer activo monetario real, intangible, descentralizado y privado de la historia de la humanidad. Tras el éxito inicial de esta criptomoneda, el bitcoin ha ido encadenando periodos de mucha relevancia e interés con otros en los que casi caía en el olvido.
En cualquier caso, la aparición de esta criptomoneda allanó el camino para que aparecieran otras muchas con una tecnología similar. En la actualidad el mercado de las criptomonedas sigue generando mucho interés pero las expectativas que se lanzaron nunca han satisfecho las demandas iniciales.
Sea como fuere, las criptomonedas en estas semanas está al alza, al menos en lo que a relevancia mediática se refiere. En Nueva Zelanda, desde el día 1 de septiembre, se pueden pagar salarios con estas divisas.
Cómo es el pago de salarios en criptomonedas
En principio, esta medida estará activa durante tres años. El Departamento de Ingresos Internos (IRD son sus siglas en inglés), publicó en agosto los detalles de una nueva legislación. En ella se estipula que el pago de la retribución en criptomonedas represente de forma regular una parte fija del salario de los trabajadores por cuenta ajena, excluyendo expresamente a los autónomos de los potenciales perceptores.
Esta normativa regula también que los criptoactivos, como el bitcoin, pueden convertirse “de forma directa” en una moneda fiat y que el valor del mismo ha de estar vinculado a una o más monedas fiduciarias.
En opinión del regulador, no todos los tipos de criptoactivos podrán ser tomados en consideración, es decir, no es válido asignar el pago del salario en cualquier criptomoneda. Solo pueden ser validados como sueldo o salario el pago en aquellas divisas que sean suficientemente similares a las nociones existentes de salario.
Esto implica que las criptomonedas no pueden estar sujetas a periodos de bloqueo, para ser convertidas directamente a una moneda fiduciario. Por otra parte, el propósito del criptoactivo ha de ser funcionar como una moneda.
Las restricciones al pago en criptoactivos
A pesar de que el proceso de pago del salario con criptodivisas ayuda a que estos activos estén dotados de una mejor imagen, la mala reputación de algunas divisas de este tipo ha obligado a la agencia tributaria e Nueva Zelanda a imponer varias barreras a esta medida.
La primera es una ya comentada, el pago se podrá realizar en criptomonedas siempre y cuando represente de forma regular una parte fija del salario. Los receptores solo podrán ser asalariados que trabajen bajo acuerdos de empleo oficiales, quedan excluidos los trabajadores autónomos.
La regulación exige que el criptoactivo elegido por cada empresa pueda convertirse de forma directa en una moneda fiat. Las monedas fiat son el euro, el dólar, el yen y el resto de monedas de curso legal.
En Nueva Zelanda, esta medida ha causado dudas sobre su idoneidad. Las criptomonedas son activos muy sujetos a falta de seguridad y volatilidad. Debemos recordar que este dinero digital existe únicamente en la red a través de un sistema de cifrado digital que está controlado mediante una base de datos descentralizada.
Los estados no poseen el control de las criptodivisas. Se sospecha que la decisión adoptada por el regulador neozelandés habría surgido como una medida recaudatoria y de control, pues ya son varias empresas en el país las que podrían estar pagando bitcoins a sus empleados para no hacer frente a sus obligaciones fiscales.
El temor de los estados con Libra
El bitcoin fue la criptodivisa pionera, y desde su creación han ido apareciendo decenas de criptoactivos más, todos ellos rodeados bajo un cierto halo de inseguridad.
El proyecto anunciado de Facebook de crear su propia criptomoenda: Libra, ha puesto en alerta a muchos estados. Nueva Zelanda, en un intento de detener el asentamiento de Libra y las intenciones de Facebook, ha optado por adoptar esta medida de pago del salario con criptoactivos.
La medida en Nueva Zelanda solo lleva activa unos días, todavía es pronto para hacer un análisis de su idoneidad. Sin embargo, el riesgo con las divisas digitales siempre está presente, pues las fluctuaciones en su valor son rápidas y grandes, y en muchos casos, inevitables.
En Europa tampoco olvidan que Facebook sigue con planes de lanzar Libra en 2020, lo que podría generar restricciones a la competencia relacionadas con el uso e intercambio de datos del consumidor.
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