Una plaga que afecta a los pinos, pudiendo llegar a causa su desfoliación total, aunque el principal problema que origina "es que las orugas pueden ser peligrosas para las mascotas y sobre todo los niños, si entran en contacto con ellas", ha indicado el edil. En esta campaña serán 182 los pinos que serán sometidos a endoterapia.
Ha explicado el concejal que el programa de trabajo aprobado contempla dos tipos de tratamiento, por un lado, la aplicación de endoterapia, que consiste en inyectar un biocida natural, a través de una cánula que se inserta en el tronco; y, por otro, la fumigación en superficies más amplias. "La endoterapia se hace árbol a árbol, es un proceso más lento, pero se ha demostrado eficaz", ha explicado el concejal. Este mismo mecanismo se está utilizando en la ciudad para tratar otra plaga arbórea, la de la galeruca, que afecta a los olmos.
La endoterapia se empezó a aplicar para el tratamiento de la procesionaria hace tres años y en esta campaña serán 182 los pinos que serán sometidos a esta práctica. La endoterapia garantiza su total eficacia al menos durante dos campañas, por tanto, los 122 pinos que se trataron el año pasado y que no se han visto afectados por procesionaria, no será necesario tratarlos este año.
Sí que se hará un tratamiento preventivo de pulverización sobre los 228 pinos a los que se les hizo endoterapia el primer año, en 2019, para así reforzar y prevenir la aparición de esta plaga, ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
La aplicación de endoterapia se hará sobre pinos localizados en el Parque de Abelardo Sánchez, donde este lunes se han estado tratando ejemplares situados junto a una zona de juegos infantiles; también se aplicará en árboles localizados en la calle Miguel Unamuno, en Hermanos Falcó, en la Fiesta del Árbol y en varias pedanías, como son Santa Ana, Los Anguijes y Campillo de las Doblas.
La pulverización con un insecticida biológico para combatir se aplicara sobre amplias extensiones, en concreto, se van a fumigar 3,8 millones de metros cuadrados, pues estos trabajos se aplicarán sobre la Fiesta del Árbol; el Parque Lineal, entre otros parques urbanos, y zonas periurbanas como La Pulgosa; el pinar que hay enfrente del Cementerio; las pinadas que tenemos en las pedanías y espacios como El Encinar; la Cañada Real de Villar de Pozo Rubio; el Torcio; La Marmota; Las Mariquillas, Cuasiermas y parte del Canal de María Cristina.
No obstante, pese a este doble tratamiento, por fumigación y por endoterapia, es posible que aparezcan algunos bolsones de orugas, que son retirados cuando se detectan. El concejal de Sostenibilidad, además, ha aprovechado para hacer una petición a la ciudadanía y aplique tratamientos frente a la procesionaria en aquellos jardines privados donde haya pinos, "son muy habituales en las parcelas", ha indicado, porque actúan como reservorio para estas orugas y al año siguiente pueden contaminar a los árboles que han sido tratados y que estaban limpios.
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