Entre las que figura la limitación de las visitas a un día a la semana a estos centros y la recomendación a los profesionales sociosanitarios de realizarse un test de antígenos a la semana, aunque se pedirá el aval de la justicia para que esta segunda medida sea obligatoria.
En la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión de Salud Pública y Vacunación de este miércoles, la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, ha asegurado que estas medidas vienen para tener a la pandemia "controlada" porque, en caso de que se disparase la incidencia en la calle, "podía afectar a los centros residenciales, cosas que no queremos que suceda".
En esta línea, en lo que respecta a su Consejería se han establecido estas medidas para evitar así que el virus entre en los centros de personas mayores y de personas con discapacidad y que los internos puedan estar "en un periodo de tranquilidad".
De esta forma, en primer lugar, se van a limitar las visitas a los centros sanitarios a un día a la semana de forma controlada en donde sólo podrá ir un familiar, y dicha visita tendrá que ser concertada con cita previa, con la atención de que el virus se cuele en las residencias.
De forma paralela, García Torijano ha recomendado a los trabajadores que se hagan un test de antígenos a la semana si han recibido la pauta completa de vacunación, y dos test de antígenos si aún no han recibido la inoculación.
Para esta medida, tanto la consejera como el presidente regional, Emiliano García-Page, han recordado que de momento es una recomendación, pero van a buscar el aval del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJCM) para que sea obligatorio.
"Sabemos que desde el TSJCM entienden la situación y la importancia que tiene controlar que los profesionales tengan esa garantía y tranquilidad de que no son personas contagiadas y no introduzcan la COVID a los centros", ha esgrimido García Torijano, a lo que ha añadido García-Page que estos test de antígenos "van a estar financiados por el Gobierno regional".
SÓLO DOS PERSONAS INGRESADAS
Por último, la consejera ha indicado que al cierre de este martes, en la región había 144 positivos dentro de estos centros residenciales, todos pasando la cuarentena dentro de las residencias, salvo dos personas que han tenido que ser trasladadas a complejos hospitalarios.
"Tenemos la situación controlada, todas estas personas tenían la tercera dosis de la vacuna y se ha demostrado que estando vacunados la COVID se está pasando como un catarro", ha explicado la consejera, por lo que ha asegurado que "es necesario que la gente acuda a los puntos de vacunación y reciban las dosis de refuerzo".
Todas estas medidas se van a revisar cada 15 días y se ha establecido como fecha límite para tenerlas vigentes el 10 de febrero. En todo momento van a estar supervisadas por la Consejería de Sanidad y se seguirán las recomendaciones que las autoridades sanitarias hagan en todo momento.